Podemos presenta sus enmiendas a la ‘Ley Celaá’ sobre ratios y concertada al no lograr acuerdo con PSOE

Unidas Podemos ha registrado en el Congreso más de medio centenar de enmiendas a la Ley Orgánica de Modificación de la LOE (LOMLOE), más conocida como ‘Ley Celaá’, en la que incluyen propuestas con las que no ha conseguido llegar a un acuerdo con el PSOE, como las ratio de las aulas o la situación de la concertada.

Este miércoles acabó el plazo de registro de las enmiendas a esta norma y PSOE y Unidas Podemos anunciaron a los medios de comunicación que presentarían de forma conjunta un centenar de iniciativas para «mejorar» y «reforzar» el texto de la ministra de Educación, Isabel Celaá.

Pero, además, el grupo confederal ha registrado 54 enmiendas más, que recogen propuestas como la limitación del número de alumnos por aula que quieren que sea de una máximo de 20 para la educación primaria y 25 para la secundaria obligatoria.

En esas propuestas, Unidas Podemos también aboga por reducir la proporción a 15 alumnos en aquellas zonas o centros de atención educativa preferente en primaria y secundaria postobligatoria. En educación infantil, por su parte, apuesta por seguir las recomendaciones de la red de atención a la infancia de la Comisión Europea.

DELIMITAR LA PRESENCIA DE LA CONCERTADA

Durante la rueda de prensa de PSOE y Unidas Podemos para informar de sus enmiendas conjuntas, fueron preguntados por esta materia, una pregunta a la que respondió la portavoz socialista de Educación, Luz Martínez Seijo, señalando que sus textos no iban a por ese camino porque la ley ya recogía un máximo y que la bajada de ratios pueden hacerla «las comunidades autónomas».

En otras de las propuestas presentadas por los ‘morados’ se recoge una modificación del texto en ciertos puntos para «dejar claro» que la escuela pública es aquella «que está gestionada por las administraciones públicas», que son «sus titulares» y que «ni los centros privados, ni los que tienen privatizada su gestión pueden considerarse públicos en el sentido estricto».

Además, busca establecer el carácter subsidiario de las escuelas privadas y concertadas y asociarlo a las necesidades de escolarización en cada área escolar e incluye medidas para reducir la duración mínima de los conciertos y para que se le retire a aquellas escuelas concertadas que discriminen a los alumnos por razón de género, religión o procedencia, entre otros.

LIBERTAD DE ELECCIÓN

También recogen modificaciones relacionadas con la libertad de elección de centro de los padres, un derecho que, a su juicio, no se puede equiparar al de los menores a recibir una educación en igualdad.

Así, en el artículo relacionado con esta materia, Unidas Podemos quiere modificar el texto para que recoger que la elección de centro privado o concertado por parte de las familias se entienda «como la manifestación de una preferencia que sólo podrá ser respetada cuando sea compatible con la aplicación de los criterios que han de presidir la admisión (…): igualdad de oportunidades y proximidad al domicilio».

También buscan prohibir que los privados y concertados no puedan «en ningún caso» su alumnado «en función de su carácter propio».

Los morados también presentan en solitario medidas que tienen que ver con el establecer por ley un aumento progresivo de las plazas públicas, que las diferentes religiones se impartan «al margen» del currículum común o la creación de un cuerpo unificado de profesorado, entre otras.

Fuentes parlamentarias de Unidas Podemos han explicado a Europa Press que este medio centenar de enmiendas «complementan las conjuntas registradas junto al PSOE» e «inciden más en aspectos en los que se coincide especialmente con las distintas asociaciones de la comunidad educativa».