Amnistía Internacional ha hecho un llamamiento a los líderes y lideresas mundiales que están respondiendo a la pandemia para que no utilicen el Covid-19 como «excusa» para no actuar contra la crisis climática.
«Los líderes y lideresas mundiales deben dejar de utilizar la COVID-19 como excusa para demorar la adopción urgente de medidas contra la crisis climática si no quieren arriesgarse a defraudar aún más a los niños y las niñas y a las generaciones futuras», ha advertido la ONG.
Así lo ha manifestado Amnistía Internacional en vísperas de este viernes 25 de septiembre, para cuando hay convocadas huelgas escolares contra el cambio climático en todo el mundo.
Amnistía Internacional apoya a todos los niños, niñas y jóvenes que participan en las huelgas por el clima. En todo el mundo, los niños y las niñas ha visto alteradas de manera inimaginable sus vidas, su educación y su salud como consecuencia de la COVID-19″, ha precisado la organización.
En este sentido, considera «absolutamente vergonzoso» que tengan que pasar más tiempo fuera de la escuela «para exigir a las personas adultas que hagan lo que hay que hacer», en este caso, para advertir de las «inconcebibles consecuencias que tendrá la inacción climática en sus vidas y derechos humanos», tal y como ha afirmado el director del Programa de Derecho y Política de Amnistía Internacional, Ashfaq Khalfan.
Según ha precisado, se suponía que 2020 iba a ser «el año de la acción climática», pero, «lamentablemente, está siendo el año de la COVID-19». Si bien, recuerda a los políticos que renunciar a la acción climática es tener «una tremenda miopía política», dado que «el calentamiento global provoca desastres, enfermedades y otros efectos de proporciones inconmensurables».
Amnistía recuerda que, con el objetivo de limitar el calentamiento global a los niveles preindustriales de 1,5°C, los gobiernos acordaron presentar compromisos actualizados para reducir las emisiones. No obstante, precisa que, en todo el mundo, «sólo 12 países han presentado hasta ahora planes», y la fecha límite es el final del año.
La ONG pide a los gobiernos que aprueben planes que promuevan economías sin emisiones de carbono y pongan fin a las subvenciones y rescates a empresas del sector de los combustibles fósiles.
«Si los gobiernos pueden destinar miles de millones a planes de regulación temporal de empleo y rescatar a empresas, deben poder tomar la decisión obvia de comenzar urgentemente a abandonar de manera progresiva los combustibles fósiles,» ha manifestado Ashfaq Khalfan.