El Rey Felipe VI ha defendido un sistema universitario «moderno, robusto, comprometido e innovador» para afrontar «tiempos de incertidumbre» como los actuales. El Rey ha presidido este miércoles el acto de apertura del curso académico de las universidades españolas celebrado en la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) en el que ha mencionado la situación «extraordinaria» provocada por la pandemia sanitaria y que ha afectado a la actividad académica.
«Este año no es nada normal y está siendo, sin duda, un año muy difícil. Mucho es el sufrimiento, mucha es la angustia yla incertidumbre que llevamos acumulados y que en estos días vuelven a intensificarse», ha reconocido Felipe VI, al tiempo que ha aprovechado para transmitir «un mensaje de afecto, respeto y gratitud a toda la gran familia universitaria española».
En este sentido, ha expresado su deseo de que «frente a los enormes retos, frente a la pandemia y sus consecuencias, prevalezca la ilusión y la esperanza que siempre debe infundir la trascendental acción humana de enseñar y aprender».
El monarca ha estado acompañado en el acto por el ministro de Universidades, Manuel Castells; la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y el presidente de Conferencia de Rectores de Universidades de España (CRUE), José Carlos Gómez Villamandos, entre otras autoridades.
El Rey ha aludido a un «entorno cambiante y crecientemente complejo» en el que «las universidades están llamadas a desempeñar unas funciones cada vez más importantes y heterogéneas». Entre estas funciones se ha referido a «la captación de talento, la formación de profesionales en todos los sectores, o la producción de conocimiento científico, tecnológico y humanístico transferible al sistema productivo para hacerlo más competitivo».
Igualmente, ha animado a las instituciones académicas, a «continuar y potenciar su papel en la generación de nuevas ideas de las que deriven amplios procesos de innovación y que permitan comprender los cambios, gestionar y conducir mejor en las incertidumbres que generan, para sortear sus riesgos y lograr más impactos positivos».
Ha instado, no obstante, a «cuidar y preservar los éxitos materiales ya alcanzados, junto a la estabilidad y cohesión social y política». Porque, según ha afirmado, «las universidades destacan por su contribución al fortalecimiento de los valores democráticos sobre los que se sustenta la sociedad española». Ha instado, en cualquier caso, que la legislación siempre «garantice y refuerce la libertad de cátedra y de pensamiento».
El Rey se ha referido asimismo al «doble reto» al que se enfrentan las instituciones académicas «en tiempos de incertidumbres y también de oportunidades». Para Felipe VI, estos retos son la internacionalización y la necesidad de reforzar «aún más el papel de la educación superior como instrumento de promoción y progreso individual».
En esta dirección ha recordado que «las universidades han permitido a lo largo de su historia que muchas generaciones de jóvenes hayan podido progresar y mejorar en su vida laboral y social» y ha asegurado que la formación universitaria en España se ha convertido en un «importante instrumento para el logro de la igualdad de oportunidades».
El Rey Felipe ha finalizado su discurso con un reconocimiento al «gran esfuerzo» realizado por las universidades el pasado curso para «transformar sus métodos de docencia, con vistas a evitar la pérdida del curso universitario» y demostrar que «pese a todo, la investigación universitaria siguió avanzando».
Y, ante el nuevo curso, ha agradecido la labor de profesorado, estudiantes y personal de administración y servicios para «conseguir que el sistema universitario pueda funcionar lo mejor posible en circunstancias tan complejas».
«Las universidades, como instituciones al servicio de la sociedad, conforman un espacio fundamental del sistema educativo. Tienen, y por ello merecen, la consideración, el reconocimiento y el apoyo de toda la sociedad española, una sociedad que trabaja por superar colectivamente las circunstancias adversas y por avanzar hacia el futuro», ha concluido el monarca.