Las ONG que operan barcos de rescate en el Mediterráneo se han mostrado este miércoles contrarias al pacto europeo sobre migración y han pedido a la UE que pongan en marcha una serie de políticas destinadas a «salvar vidas» y no a «ponerlas en peligro».
En una carta conjunta dirigida a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, las organizaciones han lamentado que el pacto no incluya operación alguna de búsqueda y rescate en la zona a pesar de que ella misma ha dicho en alguna ocasión que «salvar vidas en el mar no es una opción».
«Consideramos que la seguridad y el equipamiento de nuestras embarcaciones, así como la transparencia al intercambiar información y comunicación con las autoridades nacionales, no pueden ser los puntos principales de la Comisión Europea al hablar de la situación actual en el Mediterráneo», han aseverado antes de reiterar lo que consideran las medidas adecuadas para «configurar el marco legal en la frontera más mortífera del mundo».
Según el Derecho Internacional, señalan, las personas rescatadas en el mar deben ser trasladadas al lugar seguro más cercano donde sus vidas no corran peligro y se puedan satisfacer las necesidades humanas básicas.
«El derecho a solicitar asilo y el principio de no devolución se repiten en los Tratados de la Unión Europea, que también declara que la Unión se basa en los valores del respeto a la dignidad humana, derechos, libertad, democracia, igualdad y Estado de Derecho», han recordado.
Así, el texto critica que «en lugar de apoyar misiones de búsqueda y rescate que salvan vidas en el Mediterráneo, los gobiernos europeos están ejerciendo una presión indebida sobre las organizaciones de la sociedad civil, haciendo acusaciones infundadas contra ellas e impidiendo que los buques de búsqueda y rescate entren y salgan de sus puertos».
Las ONG han denunciado que estas acciones han hecho que sea extremadamente difícil para las organizaciones de búsqueda y rescate continuar su trabajo de salvar vidas. Por lo tanto, solicitan el establecimiento de un programa europeo de búsqueda y salvamento.
«Los países deben permitir que todos los buques que estén realizando actividades de búsqueda y rescate puedan atracar en sus puertos, desembarcar las personas que hayan sido rescatadas y regresar al mar de manera oportuna», han afirmado antes de recordar que «intentar evitar las operaciones de salvamento de las ONG y los buques comerciales es un peligroso enfoque que pone vidas en riesgo».
En este sentido, han exigido el fin de los retornos a Libia y la cooperación con la Guardia Costera. «Libia es un país destrozado por la guerra, donde refugiados y migrantes son detenidos en condiciones horribles que violan sus derechos humanos básicos», han alertado.
Por último, han pedido que se facilite un sistema de redistribución automática para «dar por terminada la práctica ilegítima de condicionar el desembarco de personas a acuerdos sobre redistribuciones y concluir una reforma justa del Reglamento Dublín III».