La Audiencia Nacional ha ordenado prisión provisional para los presuntos autores de la muerte de dos jóvenes melillenses a bordo de su embarcación en aguas marroquíes el 27 de octubre de 2013″, aunque para hacer efectiva esta resolución sería necesario que el reino alauí aceptara la extradición de los tres militares a España, algo que de momento no ha ocurrido tras casi ocho años desde que ocurrieron estos sucesos en ‘Punta Negri’, aguas marroquíes situadas a unos 35 kilómetros de la ciudad española de Melilla.
Según ha informado a Europa Press el despacho de abogados ILOCAD, fundado y dirigido por el exjuez Baltasar Garzón, el Juzgado Central de Instrucción número 4 de la Audiencia Nacional ha decretado prisión provisional comunicada e incondicional para un comandante y dos sargentos «por la presunta muerte de los jóvenes ametrallados por una patrullera de Marruecos en 2013».
ILOCAD ha señalado que la causa de Emin Mohamed Driss, de 20 años, y Abdeselam Ahmed Ali, apodado Pisly, de 24, presuntamente asesinados mientras navegaban en una embarcación autorizada para navegar por aguas marroquíes «ha dado un paso importante en la investigación» después de que el tribunal español haya señalado a estas tres personas como «presuntos autores del tiroteo que causó la muerte de los dos jóvenes en octubre de 2013».
Igualmente, el despacho de abogados ha destacado que la Audiencia Nacional ha decretado la emisión de las órdenes europea e internacional de búsqueda, detención e ingreso en prisión, así como la comparecencia judicial en las 72 horas siguientes a que sean puestos a disposición judicial.
LOS HECHOS
Los hechos sucedieron el 27 de octubre de 2013, cuando los dos ciudadanos españoles conocidos como Emin y Pisly murieron al parecer como consecuencia de los disparos que recibieron desde la Patrullera de Costa nº 116 de la Base Naval nº 5 en Alcazarseguir perteneciente a la Marina Real del Reino de Marruecos. Los jóvenes navegaban en aguas jurisdiccionales marroquíes a bordo de una embarcación tipo Zodiac, con matrícula y bandera española, y que «estaba autorizada para navegar por aguas marroquíes», según ha asegurado ILOCAD.
La petición del despacho de abogados, que actúa pro bono y ha venido solicitando esta diligencia de investigación que ahora se ha acordado pese a la oposición del Ministerio Fiscal, ha visto como resultado el auto acordando la petición de prisión provisional, así como las mencionadas órdenes europea e internacional de detención y entrega de los presuntos autores.
«Hoy podemos celebrar la buena noticia para las familias de las víctimas, representadas por este despacho, y que en todo momento se han sentido desprotegidas y abandonadas«, ha indicado ILOCAD.
Al respecto, ha aseverado que «en ningún momento, desde que se sucedieron los hechos, ni el Gobierno español ni el marroquí han dado explicación alguna ni han impulsado la investigación de los asesinatos».
Por último, han destacado que, tras la desestimación del archivo de la causa, tal y como pedía la Fiscalía, la Audiencia Nacional ha decretado este auto de prisión provisional ante el cual aún es posible la interposición de un recurso de reforma y/o subsidiario de apelación.
Los padres de Emin y Pisly, Driss Mohamed y Abdeslam Ahmed, desde que ocurrieron los hechos, han organizado varias manifestaciones y han celebrado concentraciones mensuales en estos casi ocho años para reclamar justicia por la muerte de sus hijos.
VERSIÓN MARROQUÍ
Sobre lo ocurrido el 27 de octubre de 2013, en Marruecos se ha registrado la versión oficial ofrecida por la agencia oficial de noticias de Marruecos MAP, que informó el día de los sucesos de que los hechos habrían ocurrido en una zona próxima denominada ‘Punta Negri’ después de que los dos jóvenes «desatendieran el alto de la Marina Real marroquí y huyeran». Durante la persecución, añadió la agencia, «los agentes tuvieron que realizar disparos después de que presuntamente los melillenses quisieran embestirles con su embarcación».
Por último, la MAP informó de que «la Policía marroquí sospecha que podrían dedicarse al narcotráfico» si bien la propia MAP admitió que «en la lancha no se encontraron sustancias estupefacientes«.