En los últimos días, la guerra entre Kiko Matamoros y Makoke se ha recrudecido, con un continuo intercambio de reproches y acusaciones de los que durante casi 20 años formaron una de las parejas televisivas más consolidadas. Mientras que la exmodelo acusa al padre de su hija Ana, entre otras cosas, de mentir en todo lo que dice, de ser un mal padre y de dificultar la relación entre Javier Tudela padre e hijo, además de invitarle a que hable de sus sentencias condenatorias, Kiko no se queda atrás. Y es que el polémico colaborador acaba de acusar a su ex de serle infiel cuando su hija tenía sólo 8 años y ha confesado que le ha sido desleal en muchas ocasiones porque no la quería y le daba asco. En definitiva, una batalla sin cuartel en la que los dos acabarán perdiendo.
Mientras tanto, y ajena a la polémica, Anita continúa con su vida. Ahora, la influencer está cumpliendo el reto de permanecer esposada a su amigo Diego y de esta guisa la hemos pillado saliendo de un conocido restaurante de la capital. Muy seria, y bastante afectada tras las declaraciones de su padre – aunque ella misma no lo quiera confesar públicamente – la hija de Kiko Matamoros ha preferido no pronunciarse al respecto. Con un «lo siento muchísimo, de verdad, buenas noches», la joven ha capeado las preguntas sobre los últimos ataques de su padre hacia su madre, Makoke, a quien está muy unida.
Si quieres ver la reacción de Anita cuando le decimos que Kiko ha dicho que su madre casi le daba asco y que la engañó durante diez años, ¡dale al play!