Aprender química no es tarea fácil. No existen atajos ni una varita mágica que te hará absorber de la noche a la mañana sus conceptos y fórmulas, pero sabes qué, sí hay técnicas que aplicadas correctamente te ayudarán a ser todo un experto en la materia.
Los primeros acercamientos que se dan sobre la química es mientras cursas el high school. Logras verla junto a física y matemática y es una verdadera pesadilla, lo único interesante son los experimentos. Cuando profundizas la materia en un campo más universitario, entras en agonía porque no cuentas con una base, así que comienzas a buscar tutores para que te ayuden. Esta es la manera indicada para aprender una de las materias más odiadas de la historia.
Cuando observas un cuadro con múltiples elementos químicos parece que la mente colapsa y te dice que va ser imposible que tengas buena relación con la materia, pero tu mente puede estar jugando contigo porque es una floja y le encanta descansar y ver Netflix. Lo primero que debes hacer es asociar las palabras con una frase o con objetos que ya estén grabados en tu mente.
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Como verás en la frase de arriba, las iniciales de cada palabra corresponden a un elemento. Te va ir buenísimo si optas por esta técnica. Otro consejo es hacer una tabla periódica vacía e ir llenando cada espacio a mano, la repetición de esta acción te ayudará a aprendértela.
