Garzón ve a los socios de investidura como «la única opción viable» para los PGE

El coordinador federal de Izquierda Unida y ministro de Consumo, Alberto Garzón, ha afirmado este sábado que la «única opción viable y sostenible para la política «nítida de izquierda» que precisa el Gobierno para los Presupuestos Generales del Estado pasa por los socios de izquierda que respaldaron la investidura de Pedro Sánchez, y ha indicado que deben servir para avanzar hacia un «país republicano y plurinacional».

Durante su intervención en la Asamblea Político y Social celebrada este sábado de forma telemática por Izquierda Unida, ha hecho un llamamiento explícito para llevar a la práctica una «política nítida de izquierda» reforzando la mayoría de investidura» para sacar adelante los Presupuestos y «ensamblar a las fuerzas políticas para poder construir otro modelo de país».

Garzón ha defendido que las nuevas cuentas públicas deben ser la «cristalización ideológica de un Gobierno» y tienen que responder a la «grave vulnerabilidad del sistema económico que ha puesto de manifiesto la pandemia», lo que implica «hacer de la necesidad virtud».

Para ello, ha instado a dar un salto en el modelo productivo y de consumo» que cree que solo se logrará con «diversificación económica y la reindustrialización» para «no tener que depender de un único sector importante y aspirar a mejores salarios a través de una cualificación tecnológica más alta.

A su juicio, los nuevos Presupuestos no serán «normales» ante la pandemia y la gestión de los fondos europeos y deben «proteger a las familias trabajadoras», por lo que ha remarcado la necesidad de «ser coherentes» con sus proyectos y planteamientos, y hacer frente a las consecuencias de la pandemia, yendo más allá de compensar por las pérdidas de la misma.

El coordinador federal de IU entiende que «hay que resolver problemas estructurales, no solo coyunturales», para lo que ha demandado un «sostén parlamentario coherente», rechazando la «ola reaccionaria y centralista» de la que responsabiliza a PP, Vox y Ciudadanos y marcando como objetivo un Estado Federal que «hay que ir construyendo en la práctica desde la abstracción».

CARGA CONTRA EL PP Y CONTRA EL REY JUAN CARLOS

De igual forma, ha aprovechado su intervención para cargar contra el PP y la Monarquía, al considerar que con la «corrupción» de ambos «se ha agudizado el desprestigio institucional».

Ha responsabilizado al PP de «utilizar a las fuerzas y cuerpos de seguridad para el espionaje político, algo que aterrorizaría en cualquier sistema democrático que se precie», al tiempo que ha denunciado que «el exministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, se dedicó a espiar a los partidos y hasta a algunos de su compañeros».

«Han utilizado mecanismos del Estado para atacar a la democracia y han influido en personas sobre personas del Poder Judicial», gozando con «la complicidad y el silencio de mucha gente«, tanto fuera como dentro de este partido», ha denunciado.

A su vez, ha afirmado que la «corrupción dentro de la Casa Real no es obra de una sola persona, sino que precisa de la ayuda de otras de alta cualificación». A su juicio, «la huida del ciudadano Juan Carlos de Borbón confirma los indicios que había contra él» y que lo haya hecho «al país donde ha ido, revalida también las sospechas».

En clave interna, ha llamado a avanzar de forma decidida en la «campaña de fortalecimiento y de coordinación del espacio de Unidas Podemos», y ha defendido que todos juntos es la mejor forma para defender un modelo de país «de tradición republicana, de defensa de la clase trabajadora y de plurinacionalidad».