El vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, cree que sería «inaceptable» que se perdieran los más de 23.000 millones de euros de dinero público que se inyectó para salvar a Bankia durante la crisis financiera.
Para evitarlo, Iglesias cree que se deben activar instrumentos de política fiscal, debido a que no se le puede decir a los ciudadanos que el dinero prestado para el rescate financiero no se les va a devolver cuando los bancos no perdonan las hipotecas ni los créditos.
Así lo ha indicado el vicepresidente segundo del Ejecutivo en declaraciones a eldiario.es, donde también ha sido preguntado por el hecho de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, le ocultara información sobre la posible fusión entre CaixaBank y Bankia.
En este sentido, Iglesias ha justificado la actuación de Sánchez al señalar que «hay cuestiones que tienen que quedar en el secreto de las deliberaciones del Consejo de Ministros», si bien ha añadido que si «algo le hubiera molestado» lo tendrá que hablar con el presidente del Gobierno y no con los medios de comunicación.
«Si tengo que decirle al presidente del Gobierno que algo me ha molestado, se lo diré a él, no tengo que hablarlo con los medios de comunicación», ha sentenciado.
Igualmente, ha añadido que la fusión entre CaixaBank y Bankia, que está previsto que se apruebe este mismo jueves por los respectivos consejos de administración, podría implicar «situaciones no deseadas para el sistema financiero».
A su vez, ha lamentado no haber podido conseguir que Bankia se convirtiera en «el gran banco público del país» durante las negociaciones, por lo que ahora la conclusión es que es el Instituto Oficial de Crédito (ICO) el que debe alcanzar ese papel. «Es menos de lo que me hubiera gustado conseguir, pero 35 diputados dan para lo que dan», ha subrayado Iglesias.