El vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), Luis de Guindos, ha defendido el rescate realizado a Bankia porque no haber hecho nada hubiera sido más costoso y porque, «en última instancia, se salvó a los depositantes», lo que provocó que no se produjera más incertidumbre en el sector financiero.
«El rescate [a Bankia], en última instancia, salvó a los depositantes, por que si no las pérdidas las hubieran tenido que cubrir los depositantes con una quita», ha explicado el exministro español durante su intervención en un acto celebrado este jueves por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD) y Deloitte.
«Esa situación hubiera generado una incertidumbre brutal en todo el sistema financiero, porque la posibilidad de contagio es muy elevada», ha afirmado. En su opinión, si se hubieran impuesto pérdidas a los depositantes, eso hubiera afectado a todas las demás entidades y la caída del PIB en lo peor de la crisis no hubiera estado en torno al 8% o 9%, sino que hubiera sido «mucho más importante».
Preguntado sobre la posibilidad de que se recupere el rescate realizado a Bankia ante su posible fusión con CaixaBank, Guindos ha indicado que «hay que mirarlo» desde el punto de vista de que el rescate salvó a los depositantes. «La alternativa de no haber hecho nada hubiera sido mucho más costosa» para los contribuyentes y los ciudadanos.
Asimismo, Guindos ha asegurado que los pagos que ha tenido que realizar Bankia para compensar a los afectados por las preferentes o por su salida a Bolsa no se hubieran producido de no haber existido el rescate. «El efecto fundamental es que la banca española ahora no genera dudas», ha subrayado.