La Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso someterá a votación en su próxima sesión un convenio contra la doble imposición firmado con Bielorrusia, en un momento en que toda la UE, incluido el Gobierno español, están presionando a Aleksandr Lukashenko para que ponga fin a la represión de los opositores.
El convenio, que se firmó en 2017, figura en el orden del día de la Comisión de Exteriores para el 24 de septiembre junto con otros convenios internacionales.
El Gobierno lo remitió a las Cortes el pasado mes de junio y la Mesa del Congreso le dio trámite ese mismo mes. La relación con Bielorrusia se tensó, sin embargo, en agosto, a raíz de unas elecciones presidenciales que la UE no consideró democráticas.
La ministra de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, Arancha González Laya, habló en agosto con su colega de este país para expresarle su «profunda preocupación por la situación tras el fraude electoral». «La violencia debe cesar y los ciudadanos detenidos de forma arbitraria deben ser liberados», dijo en Twitter la jefa de la diplomacia.
El convenio, destinado a «evitar la doble imposición y prevenir la evasión fiscal en materia de impuestos sobre la renta y sobre el patrimonio» es el primero de este tipo firmado con Bielorrusia, de manera que hasta ahora esta relación se rige por uno acordado con la entonces Unión Soviética en 1985.
La negociación se remonta a 2008 y el Consejo de Ministros autorizó la firma en diciembre de 2011, pero la situación de las relaciones de Bielorrusia con la Unión Europea no favoreció llevar a cabo tal firma.
Sin embargo, en 2016 la UE levantó la mayor parte de sus medidas hacia el país por considerar que habían progresado las libertades y el Estado de Derecho. Entonces se produjo la firma del Convenio en Madrid el 14 de junio de 2017 por los respectivos ministros de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis y Vladimir Makei.
