La Comisión de Monumentos de la Real Academia de Bellas Artes de Granada ha manifestado su «profunda preocupación» por el método y el alcance de la intervención que se lleva a cabo en el Paseo de Romayla, a los pies de la Alhambra, y por su afección al conjunto monumental nazarí.
En un comunicado, la Academia de Bellas Artes advierte de «unas actuaciones improvisadas y carentes de una mínima coordinación y de un debate público y científico que parece en este caso imprescindible».
«Recordemos que resulta francamente difícil encontrar un espacio de tanta significación histórica como el afectado y que, lamentablemente, no es la primera vez que la intervención descuidada de las autoridades competentes, conduce a desafortunadas situaciones que solo de forma muy limitada y costosa han podido corregirse con el paso del tiempo».
También ha reseñado que la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico de Granada, en su sesión del pasado 14 de noviembre de 2019, informó favorablemente el proyecto presentado por el Ayuntamiento para este proyecto, que se enmarca en un convenio de colaboración con el Patronato de la Alhambra y Generalife, si bien dicho informe estuvo «condicionado al cumplimiento de una serie de requisitos, entre los que figura explícitamente la recuperación de los tramos de la acequia que puedan existir tras la correspondiente intervención arqueológica».
Este llamamiento llega después de que, hace aproximadamente una semana, la asociación conservacionista Oppidum Eleberis solicitara a la Unesco, a través de la asociación Icomos-España, la apertura de un expediente para comprobar si el proyecto del Paseo de Romayla de Granada, que calificó como «parque de hormigón», es compatible en este entorno a los pies de la Alhambra declarado Patrimonio Mundial.