La Plataforma de Inversores en Puertos Españoles (PIPE) considera que la iniciativa privada es «clave» y contribuye a favorecer el desarrollo de la actividad portuaria.
Así lo ha manifestado la organización es su junta de socios con la presencia del presidente de Puertos del Estado, Francisco Toledo, donde se ha puesto el foco en evaluar la situación que ha provocado la pandemia y trasladarle las medidas que el sector considera «vitales» para fomentar la competitividad de los puertos y empresas y reactivar así la economía.
Durante el encuentro, Toledo ha trasladado las conclusiones de la reunión del Marco Estratégico que se celebró en Santander con todas las Autoridades Portuarias el pasado mes de julio, así como las medidas que se han ido tomando como consecuencia del Covid-19 y los proyectos diseñados a medio plazo.
Por su parte, PIPE ha querido analizar en profundidad la situación en la que se encuentran los operadores y terminalistas portuarios y abordar los retos que se presentan ante una situación como la actual.
La plataforma indica que en el caso del transporte de mercancías por los puertos españoles, el tráfico se ha reducido más de un 11% en lo que va de año, alcanzando en algunos tráficos el 20%, como consecuencia de la ralentización de las importaciones y exportaciones globales.
En este sentido, el sector considera que la recuperación será lenta y supondrá un enorme esfuerzo para recuperar los tráficos de 2019, con lo que han recibido bien algunas de las medidas adoptadas por Puertos del Estado y el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, pero estas requieren, en opinión del vicepresidente ejecutivo de PIPE, José Luis Almazán, de una adaptación al «verdadero horizonte temporal del impacto de la pandemia y de considerar su implementación con carácter estructural».
En esta línea, la organización considera que los puertos españoles son juegan un papel clave en la actividad económica del país y son fundamentales en las cadenas de importación y exportación. Suelen ser los termómetros más fiables para tomar la temperatura a la economía española, y es por ello que PIPE insta a reducir los costes del transporte para mejorar la eficiencia de sus operaciones», apunta.
No en vano, explica PIPE, son los operadores portuarios, con sus inversiones permanentes en terminales y medios, las piezas que hacen que el engranaje logístico funcione y los puertos españoles sean más competitivos y eficientes.
Los inversores consideran «muy positiva» la reducción de las tasas portuarias, teniendo en cuenta que las autoridades portuarias gozan de buena salud financiera.
«La reducción de la tasa de ocupación en un 30% permitiría reducir el coste del paso de las mercancías por los puertos españoles propiciando la competitividad de estos y posibilitando a los operadores reinvertir los recursos en aras de la reactivación económica», apostilla Almazán.
En cuanto al Marco Estratégico y la modificación de la Ley de Puertos que el gobierno acaba de iniciar, PIPE valora positivamente la necesidad de repensar el modelo portuario, analizar los retos y definir las estrategias de cara a los próximos años, con el fin de tener unos puertos más competitivos, eficientes, mejor conectados, más sostenibles y digitalizados, para favorecer el desarrollo del tejido empresarial y conseguir una mayor dinamización del territorio.
Por último, los socios de PIPE han reelegido a Gonzalo Alvargonzález como presidente, con el reto, entre otros, de ampliar el número de empresas asociadas, abarcando a otros campos y que comparten mismos intereses.