Filtros para mascarillas: ¿de verdad funcionan?

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Las mascarillas ya se han convertido en un complemento indispensable en el vestuario habitual de cualquier persona. Tras la pandemia, todo el mundo debe usarlas obligatoriamente al salir a la calle y en cualquier lugar. Por eso ya hay muchas marcas que hacen sus propias mascarillas y hay un montón de variedades.

Todas las mascarillas deben llevar filtros, es el único requisito que garantiza que el virus no se propague. Pero quizás no tenemos muy claro si estos filtros funcionan. Tampoco nos dan muchas nociones de su cuidado y de su fiabilidad. Vamos a ver unos consejos para saber si el filtro de nuestra mascarilla funciona y algunas cosas interesantes más y que no se suele saber.

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Cambios de filtros

Las propiedades de las mascarillas se mantienen durante cuatro horas en las mascarillas desechables. En otras mascarillas el filtro hay que cambiarlo cada día, ya que, si no, el material va a ir degradándose y perdiendo efectividad ante la filtración de partículas. Otra cosa que hay que tener en cuenta es la manipulación de la máscara.

La mascarilla siempre hay que manipularla desde la parte posterior sin tocar la parte frontal. Siempre hay que manipularla con las manos limpias, así que hay que lavárselas a conciencia justo antes de tocar la mascarilla. Tras quitarnos la mascarilla extraeremos el filtro y lo meteremos en una bolsa que cerraremos rápidamente para tirarla.

Tras cambiar el filtro hay que lavar la mascarilla al menos a 60 grados durante al menos 30 minutos en la lavadora. SI queremos hacerlo a mano podemos usar detergente y secarla al sol. Si la mascarilla huele mal, es síntoma de gérmenes, así que hay que lavarla.