Las acciones de IAG están repuntando en bolsa este lunes después de anunciar la ampliación de capital por un importe efectivo de 2.741 millones de euros con derechos de suscripción preferente, con la finalidad de fortalecer el balance del grupo, reduciendo su apalancamiento y aumentando su posición de liquidez.
A media sesión, los títulos de IAG subían un 5,71% en el Ibex 35. Según el analista de XTB Joaquín Robles, la compañía ha sido uno de los valores «más vulnerables» de la crisis sanitaria, al igual que el resto de compañías aéreas. Las pérdidas de este periodo y la incertidumbre sobre una posible recuperación han sido los detonantes para tomar la decisión de ampliar capital.
En estos primeros momentos de la ampliación «el nivel de aceptación por parte de los inversores están siendo muy alto», con los derechos subiendo por encima del 15%, señala Robles, que destaca que aunque esta ampliación conlleva una «fuerte dilución» en la participación de los accionistas, el descuento en el precio de las acciones ayudará a que tenga una mayor aceptación por parte de los accionistas.
De su parte, el analista de IG Sergio Ávila destaca que la situación de la empresa «es muy delicada» esta año y podría serlo en 2021, ya que «podría estar lejos también de tener la actividad que tenía antes de la pandemia».
No obstante, afirma que acudir a la ampliación de capital supone «un gran riesgo» para los inversores al aumentar su posición «en una empresa débil y en tendencia negativa», dentro de un sector que puede «tardar mucho tiempo» en recuperar los ingresos de antes de la pandemia.
Iván San Félix, analista de Renta 4 Banco, considera que IAG podrá recupera su estatus como aerolínea con un nivel elevado de liquidez.
El analista señala que IAG será una de las «grandes ganadoras del sector» cuando se supere la crisis del coronavirus y «confía plenamente» en la estrategia, que consiste en una posición de liderazgo en los principales mercados, la orientación a la rentabilidad y la prudencia en la gestión de la caja.
No obstante, insiste en que el sector sufrirá cambios estructurales «muy relevantes» en los próximos años, con la desaparición de muchas compañías, fusiones o recapitalización.