El Tesoro Público volverá esta semana a los mercados con dos nuevas emisiones; una primera en la que ofrecerá a los inversores letras a 3 y 9 meses y otra el jueves de bonos y obligaciones, con las que concluirá las emisiones de deuda del mes de enero.
De esta forma, el organismo dependiente del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital celebrará dos nuevas emisiones para seguir avanzando en la consecución de su programa de financiación, revisado en mayo al alza como consecuencia de las mayores necesidades por la crisis del Covid-19.
En concreto, emitirá el martes letras a 3 y 9 meses, con una referencia de un tipo de interés marginal del -0,506% en el primer caso y del -0,449% en el segundo, en ambos casos procedentes de la emisión celebrada el pasado 25 de agosto.
Ya el jueves ofrecerá bonos del Estado a 3 años, con cupón del 0%; obligaciones a 7 años, con cupón del 0,8%; obligaciones con una vida residual de 20,1 años, con vencimiento el 30 de julio de 2041 y cupón del 4,7% y obligaciones a 30 años, con cupón del 1%.
Para determinar el coste de evolución de esta emisión, la referencia en los bonos a 3 años es el tipo de interés general del 0,392% del 6 de agosto, mientras que en las obligaciones a 7 años es el 0,021%.
Por su parte, la rentabilidad marginal de referencia en las obligaciones con vida residual de 20,1 años y vencimiento el 30 de julio de 2041 es el 2,224% del 5 julio de 2018 y en las obligaciones a 30 años es el interés del 1,217% del pasado 16 de julio.
Con estas dos emisiones el organismo cerrará el calendario de emisiones previsto para el mes de septiembre. El pasado martes colocó 6.346,3 millones de euros en letras a seis y doce meses, cerca del rango medio previsto, y lo hizo cobrando menos a los inversores, al ofrecer una rentabilidad algo menos negativa que en la emisión anterior del mismo tipo de papel.
El organismo anunció a finales de mayo una modificación de su programa de financiación para este año, que prevé elevar la emisión neta en 97.500 millones de euros, hasta un total de 130.000 millones, e incrementar en algo más de 100.000 millones la emisión bruta, hasta alcanzar los 297.000 millones de euros, como consecuencia de la mayor necesidad de financiación por el aumento de la deuda pública para hacer frente a los mayores gastos derivados del Covid-19.
No obstante, a la previsión de emisión neta se le descontarán en torno a 21.000 millones que recibirá España del sistema de reaseguro de empleo (SURE), así como la parte que perciba del fondo de reconstrucción europeo.
En detalle, estima una necesidad de financiación bruta para 2020 de 297.657 millones de euros, de los que 185.969 millones se prevé financiar mediante bonos y obligaciones y 111.688 a través de letras del Tesoro.