Los niños son personitas duras de roer. Cuesta convencerles de las cosas y cambiar sus costumbres. Se guían por la conveniencia y la comodidad, a veces por el capricho y la pura gana. Con algunos niños, según su carácter, puede ser una pesadilla conseguir que se pongan la mascarilla y no se la quiten cuando empieze a cansarles.
La mascarilla no es obligatoria antes de los 6 años, pero sí de esas edad en adelante. De todos modos, hay padres que prefieren ponerle la mascarilla a su hijo incluso cuando no es necesaria. A ellos puede chocarles, pueden no entender su utilidad y rechazar su uso. Aquí tienes algunos trucos para convencer a los niños de que se cubran la cara y enseñarles cómo hacerlo.
1Dar explicaciones claras
No podemos pretender decirle a un niño “ponte la mascarilla porque sí, porque lo digo yo”. Eso no va a funcionar. En una situación como esta es muy importante explicarse bien y hacerle entender qué son las mascarillas, para qué sirven y por qué es importante llevarla en este momento.
Una buena forma de conseguirlo es relacionando la mascarilla con valores como la responsabilidad o el respeto. Según los psicólogos infantiles también es de utilidad vincularlo con familiares, es decir, explicarles que poniéndose mascarilla están ayudando a sus abuelos, a sus tíos, padres…