El partido Vox, que ejerce la acusación popular en la pieza ‘Dina’ de la macrocausa ‘Tándem’, ha solicitado al juez de la Audiencia Nacional Manuel García-Castellón que cite a declarar en calidad de testigo a la vicepresidenta tercera del Congreso de los Diputados y diputada de Unidas Podemos Gloria Elizo.
En esa pieza separada 10 de Tándem se investiga el robo del teléfono móvil de la exasesora del líder de Podemos Dina Bousselham en 2015 y el uso y difusión en medios de los datos que contenía. Archivos incluidos en la tarjeta SD del móvil fueron hallados en soportes informáticos incautados en la entrada y registro del domicilio del comisario jubilado y en prisión preventiva José Manuel Villarejo.
Este escrito de la formación de Santiago Abascal llega después de la declaración de este jueves como testigo del exabogado de Podemos José Manuel Calvente ante el juez, en la que apuntó a la cúpula del partido ‘morado’ acusándoles de urdir una estrategia con el caso ‘Dina’ para utilizarlo en la campaña de las elecciones generales de abril de 2019.
Asimismo, interesan en el escrito que se aporten al sumario los contenidos completos de los grupos de Whatsapp y de Telegram en los que Calvente participaba en el desarrollo de su actividad como coordinador jurídico de Podemos.
En el escrito presentado por la vicesecretaria Jurídica Nacional de Vox, Marta Castro, se pide la declaración como testigo de Elizo, «responsable jurídica y transmisora de las instrucciones de Pablo Iglesias y la ejecutiva de Podemos» al equipo de legal, y del abogado Alejandro Gámez por su papel como letrado en el caso ‘Dina’.
QUE EL JUEZ ADMITA LA QUERELLA
Por otro lado, Vox solicita la admisión de la querella que presentaron en ese mismo juzgado de instrucción contra el vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias; contra su exasesora Dina Bousselham; contra la abogada de ésta Marta Flor, y contra el fiscal Ignacio Stampa, a los que imputaba seis delitos por el contenido del chat privado entre abogados de Podemos en los que Flor comentaba determinada información que había obtenido del representante del Ministerio Público.
En esa querella, que fue inadmitida por García-Castellón al constatarse «un defecto procesal subsanable», Vox indicaba que la denuncia del robo del móvil de Bousselham «obedecería a una estrategia establecida por Pablo Iglesias y demás ejecutiva del partido Podemos para, manipulando los hechos, poder ser utilizado a favor de la formación en las elecciones generales».
Desde el partido de Abascal recuerdan que en la querella se indicaba que los mensajes del chat del equipo de legal de la formación ‘morada’, y que reflejarían los contactos con los fiscales anticorrupción, deben ser puestos a disposición judicial. Como diligencias, pedían además la declaración de Calvente, del otro fiscal anticorrupción encargado del caso Miguel Serrano y del periodista Diego Rodríguez Veiga.
