La organización ecologista WWF acaba de publicar el informe “Planeta Vivo 2020”. Los datos y las conclusiones del documento son desoladores. Elaborado conjuntamente con la Sociedad Zoológica de Londres, el informe llama a “revertir la curva de la pérdida de la biodiversidad”.
“Mientras el mundo se tambalea por la alteración global más profunda de su vida, el Informe Planeta Vivo de este año proporciona una evidencia inequívoca de que la naturaleza se está desmoronando y que nuestro planeta está mostrando claras señales de advertencia”, escribe en la introducción Marco Lambertini, director general de la organización. Según él, “se necesita con urgencia un profundo cambio cultural y sistémico,que hasta ahora nuestra civilización no ha conseguido alcanzar: la transición a una sociedad y un sistema económico que valore la naturaleza”.
Tal y como él mismo advierte, “la naturaleza está disminuyendo a escala mundial a un ritmo sin precedentes en millones de años”. Los datos hablan por sí mismos: en los últimos cincuenta años la fauna vertebrada se ha reducido en un 68% de media. Estas son algunas de las conclusiones del informe Planeta Vivo.
3Índice Planeta Vivo
El Índice Planeta Vivo hace un seguimiento de la abundancia de casi 21000 poblaciones de mamíferos, aves, peces, reptiles y anfibios en todo el planeta. Esto constituye un indicador de la salud general de los ecosistemas. Y “su grave descenso es una buena prueba de la catastrófica deriva de la naturaleza”.
El Índice Planeta Vivo global 2020 detecta una disminución media del 68% de las poblaciones estudiadas de mamíferos, aves, anfibios, reptiles y peces. Más grave es la situación en las regiones tropicales americanas. Allí la reducción del Índice Planeta Vivo alcanza el 94% en los últimos cuarenta años. El informe señala como causas la alteración de praderas, sabanas, bosques y humedales, la sobreexplotación de especies, el cambio climático y la introducción de especies exóticas.