La organización ecologista WWF acaba de publicar el informe “Planeta Vivo 2020”. Los datos y las conclusiones del documento son desoladores. Elaborado conjuntamente con la Sociedad Zoológica de Londres, el informe llama a “revertir la curva de la pérdida de la biodiversidad”.
“Mientras el mundo se tambalea por la alteración global más profunda de su vida, el Informe Planeta Vivo de este año proporciona una evidencia inequívoca de que la naturaleza se está desmoronando y que nuestro planeta está mostrando claras señales de advertencia”, escribe en la introducción Marco Lambertini, director general de la organización. Según él, “se necesita con urgencia un profundo cambio cultural y sistémico,que hasta ahora nuestra civilización no ha conseguido alcanzar: la transición a una sociedad y un sistema económico que valore la naturaleza”.
Tal y como él mismo advierte, “la naturaleza está disminuyendo a escala mundial a un ritmo sin precedentes en millones de años”. Los datos hablan por sí mismos: en los últimos cincuenta años la fauna vertebrada se ha reducido en un 68% de media. Estas son algunas de las conclusiones del informe Planeta Vivo.
1«Un momento especialmente complicado»
El documento llega en un momento en el que todo el planeta está centrado en otro asunto. La pandemia del coronavirus y sus estragos han hecho desaparecer de un plumazo las preocupaciones medioambientales. Pero, advierten los expertos, ambos fenómenos tienen más relación de la que nos pensamos.
“La serie de catástrofes recientes, como los incendios devastadores, las plagas de langostas y la pandemia de la Covid-19 están sacudiendo la conciencia ambiental global, demostrando que la conservación de la biodiversidad debe convertirse en una inversión estratégica no negociable destinada a preservar nuestra salud, recursos y seguridad”, dice el informe.