La comisión de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria del Parlamento Europeo ha pedido este viernes que la UE eleve su objetivo de reducción de emisiones de gases de efecto invernadoer al final esta década al 60% con respecto a los niveles registrados en 1990, lo que supone veinte puntos más que la meta fijada en la actualidad.
La resolución ha sido aprobada con 46 votos a favor, 18 en contra y 17 abstenciones y ahora debe ser aprobada por el conjunto del pleno de la Eurocámara en la sesión prevista para comienzos de octubre.
La UE mantiene por ahora una meta de recorte de emisiones de dióxido de carbono (CO2) del 40%, pero ha asumido que se trata de un objetivo insuficiente para alcanzar en 2050 la neutralidad climática (una situación en la que se hayan reducido al máximo las emisiones contaminantes y las restantes sean compensadas, por ejemplo, por la acción de los bosques).
La Comisión Europea presentó en marzo su proyecto de ley para la primera normativa climática europea. El texto, sin embargo, no especificaba una nueva meta más ambiciosa, pero Bruselas adelantó que se situaría «entre el 50% y el 55%.
La institución presidida por la alemana Ursula von der Leyen tiene previsto anunciar en las próximas semanas su propuesta concreta para dicho recorte y con este voto la comisión de Medio Ambiente del Parlamento Europeo intenta presionar para que la reducción sea superior al 55%.
«La adopción de este texto manda un mensaje claro a la Comisión Europea y al Consejo de la UE (los países) para las próximas negociaciones: esperamos que todos los Estados miembros alcancen la neutralidad climática para 2050 como muy tarde y necesitamos objetivos intermedios para 2030 y 2040 para la UE y así conseguirlo», ha afirmado la responsable del informe, la socialdemócrata sueca Jytte Guteland.