Reyes Maroto afirma que el protocolo se culminará la próxima semana y se trasladará el día 28 a la CE con una propuesta conjunta de todos los ministros de Turismo
La ministra de Turismo, Industria y Comercio, Reyes Maroto, ha garantizado este jueves que habrá test PCR a los turistas en origen y destino con el fin de crear corredores turísticos seguros para la temporada de invierno.
En declaraciones a los periodistas tras reunirse con el presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, y representantes de los cabildos y de las patronales turísticas, la ministra ha apuntado que el 28 de septiembre se aprobará un documento conjunto suscrito en esa línea por los ministros de Turismo de los países miembros que se remitirá a la Comisión Europea.
Además, ha comentado que se trabaja en utilizar otras variables para reactivar la movilidad segura en Europa y que no se tenga en cuenta únicamente la incidencia acumulada del coronavirus sino también el impacto en los territorios y el índice de contagiosidad, por ejemplo.
La ministra ha valorado la «actitud positiva» de Reino Unido de abrir estos corredores con las islas porque permitiría acabar con las cuarentenas y las restricciones de movilidad y espera que sigan el mismo camino Alemania y los países nórdicos.
En esa línea, ha dicho que «ha llegado el momento» de homogeneizar los test tras haberlo desaconsejado la OMS hace algunos meses y hacer convivir el coronavirus con la reactivación de la economía. «El turismo debe estar dentro del corazón de Europa y dar confianza a los turistas», ha indicado.
Además, ha dicho que el protocolo, en el que trabajan los ministerios de Turismo y Sanidad, el Gobierno de Canarias y agentes turísticos, estará finalizado la próxima semana y ahí se definirá también como se costea la medida y en qué lugares se realiza.
AÚN SE DESCONOCE EL COSTE
La ministra ha comentado que aún es «prematuro» saber el coste final y el comienzo exacto de la iniciativa pero resaltó la «oportunidad» que se ha abierto en la UE y la «receptividad» de los países emisores.
Reyes Maroto ha reconocido la «gravedad» económica de Canarias por su alta dependencia del turismo –casi el 35% del PIB– por lo que ha garantizado que habrá un plan turístico exclusivo para el archipiélago a través de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) y fondos también específicos con cargo al programa de reconstrucción de la UE.
No obstante, ha dicho que no se puede «bajar la guardia» y seguir insistiendo en «reducir» el número de contagios para poder recuperar la próxima temporada turística, lo mismo que proseguir con la colaboración público-privada e interadministrativa, que ha sido un «ejemplo» en el archipiélago.
La ministra ha anunciado también que en los próximos días se firmará un programa para mejorar la formación de unos 70.000 trabajadores del turismo, con adaptación a los nuevos protocolos sanitarios, y subrayó el «plan de choque eficaz» que ha recibido el subsector turístico desde que empezó la pandemia con los ERTE, los créditos ICO o las ayudas a los autónomos, más la derivación de los transportes en el ‘fondo Covid’.
En el caso concreto de Canarias, con unos 130.000 trabajadores afectados por ERTE –más del 10% de España–, ha dicho que se debe prorrogar y tener en cuenta las especificidades de las islas y la reactivación de su temporada turística.
«Canarias no luchará sola, hay que mantener esta red de seguridad mientras se reactiva», ha agregado.
TORRES VE CLAVE «DOBLAR LA CURVA» DE CONTAGIOS
Torres, por su parte, ha señalado que la creación de los corredores turísticos seguros son una «muy buena noticia» para Canarias que ya pidieron hace meses en la Conferencia de Presidentes, al tiempo que destacó que se vaya a tener en cuenta también el índice de contagiosidad, que ahora está por debajo de 1 en el archipiélago.
Con todo, cree que «lo más importante es doblar la curva» y tener datos mejores en Canarias, tanto por mantener la buena salud de la población como también porque el archipiélago se juega «el presente y el futuro».
«No queremos una quiebra social», ha comentado, reivindicando que aún se está «a tiempo», aunque «no es mucho», para ofrecer un producto turístico «magnífico» el próximo invierno.