EY obtuvo unos ingresos récord de 37.200 millones de dólares (31.200 millones de euros) en todo el mundo durante en su último año fiscal, finalizado el pasado junio de 2020, lo que supone un crecimiento del 4,1% respecto al mismo periodo del ejercicio anterior, a pesar del impacto económico mundial causado por la pandemia.
«La pandemia Covid-19 ha afectado a personas, empresas y comunidades de todo el mundo, creando nuevos desafíos. Si bien los últimos meses han sido desafiantes para todos, en EY también nos hemos centrado en nuestra nueva estrategia NextWave, que iniciamos en octubre pasado y confirma nuestra ambición de construir valor a largo plazo para todos nuestros stakeholders», ha asegurado el presidente y consejero delegado mundial de EY.
Esta estrategia NextWave a la que hace alusión tiene el objetivo de crear valor a largo plazo basado en cuatro dimensiones, como son el valor humano, valor de consumidor, valor social y valor financiero, que ha dado lugar a la redefinición de dos de sus líneas de servicio: Strategy & Transactions y Consulting.
Para este año, y con el objetivo de acelerar la transformación digital de la firma, EY prevé invertir 1.500 millones de dólares (1.261 millones de euros) en sus servicios de auditoría, nuevas soluciones tecnológicas, así como en profesionales y alianzas estratégicas.
Respecto al último año fiscal, todas las líneas de servicio de EY registraron crecimiento: Auditoría un 3,1%; Consultoría un 4,9%; Fiscal y Legal un 5,1%; y Servicios de Asesoramiento en Transacciones un 2,8%. También los ingresos aumentaron en todas las áreas geográficas: América, un 3,4%; Europa, Oriente Medio, India y África (EMEIA), un 3,4%; y Asia-Pacífico, un 8,2%.
Durante este periodo, EY prestó servicios de continuidad y a gobiernos y empresas a raíz de la Covid-19, como el proyecto con el Gobierno de Chile para la creación de herramientas de triaje digital que permite examinar a los pacientes antes de entrar en salas de emergencia, entre otros.