El fabricante español de componentes para vehículos Grupo Antolin ha abierto un nuevo centro de innovación en China con el objetivo de reforzar sus capacidades en cuanto a la investigación, el desarrollo y la innovación (I+D+i), pese a registrar unas pérdidas netas atribuidas de 157,3 millones de euros durante el primer semestre de este año debido a la pandemia del coronavirus, en comparación con los 20,1 millones que ganó en el mismo periodo de 2019.
Tal como han explicado fuentes de la compañía, estas cifras se enmarcan dentro de la evolución de la crisis del coronavirus, que obligó a la mayoría de las plantas del sector automovilístico de todo el mundo a mantenerse cerradas durante semanas para evitar una expansión mayor del virus.
Entre enero y junio de este año, la facturación del grupo Antolin cayó un 42%, hasta un total de 1.553 millones de euros, en comparación con los 2.678 millones que ingresó en el mismo periodo de 2019.
Por divisiones, la unidad de negocio de Techos del fabricante de componentes para automóviles alcanzó unas ventas de 608 millones (-39%); la de Puertas, 597 millones (-47%); la de Paneles de Instrumentos y Consolas, 237 millones de euros (-37%), y la de Iluminación, de 108 millones de euros (-37%).
Grupo Antolin ingresó 776 millones de euros en Europa (-44%) y 563 millones en Norteamérica (-45%). Además, facturó 179 millones de euros en Asia-Pacífico (-19%) y 17 millones en Mercosur (-60%).
Por su parte, la empresa contabilizó unas pérdidas operativas de 95,9 millones de euros durante el primer semestre, muy por debajo de los 83,4 millones de euros que ganó entre enero y junio del ejercicio anterior.
Sin embargo, desde la compañía española han destacado que a pesar de estas cifras, la situación de la industria ha mejorado considerablemente y que en la actualidad todas sus plantas están operativas.
NUEVO CENTRO EN CHINA
Por todo ello, Grupo Antolin sigue adelante con la transformación de su negocio y con la ejecución de su estrategia, por lo que ha abierto un nuevo centro de innovación en Shanghái (China). El objetivo de estas nuevas instalaciones es adaptarse mejor y más rápido a las necesidades y requerimientos de sus clientes en China.
«Aunque la prioridad sea hacer frente a la crisis, el Covid-19 no nos detiene. Queremos liderar, desde el interior del vehículo, el cambio que está viviendo la industria automovilística, que se acelerará con esta crisis», ha indicado el presidente de la empresa, Ernesto Antolin.
