La alcaldesa de Mogán habla sobre la situación de los 352 migrantes del Muelle de Arguineguín

La alcaldesa del municipio turístico de Mogán (Gran Canaria), Onalia Bueno, ha tachado de «calamidad humana» la situación de los 352 migrantes que permanecen desde hace 15 días en un campamento instalado en el Muelle de Arguineguín, entendiendo que «los superiores políticos» deben dar una respuesta.

Así lo ha indicado durante una visita al recinto portuario junto al magistrado de la Instancia Nº8 del Juzgado de Las Palmas con competencias en el CIE de Barranco Seco, Arcadio Díaz Tejera, con quien coincidió en que la crisis migratoria que está sufriendo Canarias, y en especial Gran Canaria, no concierne solo a las islas, sino al conjunto de España y Europa.

«Desde el Ayuntamiento vamos a insistir en una solución hasta agotar la vía institucional para ver si el Gobierno central reacciona con una solución para estas personas, porque estamos hablando de vulneración de los derechos humanos», expuso la primera edil.

Bueno reconoció sentirse afectada, sobre todo por la situación de las siete mujeres y los tres menores que se encuentran en el muelle. «Son los más vulnerables –resaltó– y tenían que haberlos llevado directamente a un espacio de mayor calidad».

«Como representante política me siento frustrada e impotente de no poder canalizar con mayor diligencia esta situación de drama social en nuestro municipio«, lamentó.

DÍAZ TEJERA SUBRAYA EL «ATRONADOR SILENCIO» DE LOS POLÍTICOS

Por su parte, el magistrado Díaz Tejera subrayó «el atronador silencio» de los cargos públicos respecto a este asunto, ya que, entendió, resulta obvio que las condiciones en las que se encuentran los migrantes en el Muelle de Arguineguín no son las adecuadas.

De igual modo, expuso que se lleva reclamando desde hace once meses que se habiliten establecimientos en deshuso o vacíos a los que poder trasladar a los migrantes.

Recordó también que la que la crisis migratoria de 2006 fue solventada por el Gobierno de España a través de acuerdos bilaterales con los países emisores de migrantes para sellar sus fronteras, y financiando proyectos de desarrollo en aquellas regiones.