“Son tan grandes…” El explosivo bikini de Georgina Rodríguez lo deja claro

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La belleza y sensualidad de Georgina Rodríguez, actual pareja del astro del fútbol mundial, Cristiano Ronaldo, es envidiable en el entorno de novias y esposas de los futbolistas de la élite. Un cuerpo increíble es el que ostenta la modelo de 26 años de edad, quien además no teme a mostrar todo su poder en las redes sociales.

Georgina Rodriguez

Indudablemente, su cuenta de Instagram es variada, debido a que puedes encontrar post sensuales que calientan a cualquiera; otros con su familia en los que a simple vista se observa la felicidad y unión familiar que ellos tienen; y uno que otro dedicado netamente a su gran amor, Cristiano Ronaldo. Además, Georgina Rodríguez sabe claramente que ella posee unos gigantescos atributos que pueden enloquecer a cualquier hombre, tanto así, que logró sacar a Cr7 de su larga etapa de soltería.

La argentina nacida en Buenos Aires publicó, hace unas semanas, una imagen con el atacante de la Juventus de Turín en la que se ven muy juntitos y melosos. Además, el copy del post es sumamente tierno: «Lo único que me gusta más que tú, somos nosotros». Esto denota la pasión que hay en el corazón de ella hacia Cristiano Ronaldo y, al mismo tiempo, expresa su compromiso con el luso a través de los emojis de un ancla, que ratifica la firmeza de su relación, y un corazón que muestra sus sentimientos hacia su pareja.

La publicación causó rápidamente alegría y felicidad por medio de los comentarios de sus seguidores. Asimismo, ésta ya tiene más de 3 millones de likes en tan sólo 6 días.

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Ama el ejercicio tanto como Cristiano

Cristiano Ronaldo siempre afirmó que hacer ejercicio es una de las cosas que él más aprecia y disfruta en esta vida y, al parecer, su pareja Georgina Rodríguez también sabe cómo ponerse en forma y mantener ese maravilloso cuerpo que tiene. Definitivamente, el trasero de la argentina es gigantesco y, a simple vista, dañino para la mente humana.

Asimismo, mencionó en el copy que «la importancia de ser uno mismo radica en la aceptación y el reconocimiento de quiénes somos, todos tenemos dones por lo que todos tenemos algo qué enseñar, compartir y aprender. Eso es lo que nos hace únicos y especiales».