La tenista canadiense Bianca Andreescu anunció este jueves que no estará en el US Open para defender el título que logró el año pasado en Nueva York, para centrarse en una buena preparación tras «desafíos imprevistos» como la pandemia de coronavirus.
La número seis del mundo y vigente campeona del ‘grande’ estadounidense se convirtió en la última de una larga lista de bajas para el plato fuerte del regreso de la competición. La crisis de la COVID-19, mayormente, y un calendario al que hay que adaptarse no dejan de engordar las bajas para el torneo que se disputará del 31 de agosto al 13 de septiembre.
La incertidumbre fue también la del propio torneo, como el resto del circuito, pendiente de la pandemia. Tras la confirmación de que el torneo seguía adelante han sido muchas las bajas, entre ellas la número uno del mundo Ashleigh Barty o el número dos de la ATP, Rafa Nadal. Al menos, el torneo masculino pudo confirmar este jueves la presencia del número uno, Novak Djokovic.
«Después de muchas discusiones con mi equipo, he tomado la difícil decisión de que no estaré en Nueva York este año. He tomado esta decisión para centrarme en mi preparación y asegurarme de que mi regreso sea al máximo nivel», escribió en redes sociales una Andreescu que no compite desde octubre de 2019, en las Finales WTA de Shenzhen, donde se lesionó en la rodilla izquierda.
«Me doy cuenta de que los desafíos imprevistos, incluida la pandemia de COVID-19, han comprometido mi capacidad de prepararme y competir en el grado necesario para jugar al máximo nivel», añadió.