No sabemos si es una segunda ola o qué, pero lo que está claro es que el coronavirus sigue siendo una amenaza muy real. En la tarde del lunes Sanidad notificó que había registrado 26.000 casos nuevos durante el fin de semana, 10.000 de los cuales fueron en Madrid. 237 personas han muerto por coronavirus en los últimos siete días. A esto hay que sumarle que en los próximos días empezará el curso en casi todas las comunidades, por lo que es previsible que veamos multiplicarse los positivos en muy poco tiempo.
Ante esta situación, urge agilizar el sistema de rastreo y detección de positivos. Una de las vías exploradas para conseguirlo ha sido el uso de aplicaciones móvil. En España se ha creado «Radar Covid«, una app que desde el principio suscitó dudas sobre su eficacia y su respeto a la privacidad. Hace pocos días, se hizo público un manifiesto en el que más de cien miembros de la comunidad académica reclaman más transparencia en el desarrollo de “Radar Covid”.
3Problemas de «Radar Covid»
Desde el comienzo se dijo que “Radar Covid” era un complemento. Un refuerzo a los rastreadores de carne y hueso, las mascarillas, el gel hidroalcohólico y la distancia de seguridad. No obstante, buena parte de la población ha sido reacia a instalar esta aplicación, principalmente por desconfianza hacia el tratamiento de sus datos.
En el “Manifiesto en favor de la transparencia en desarrollos de software públicos”, los académicos han solicitado la máxima información sobre el sistema de gobernanza y toma de decisiones en el diseño de la aplicación “Radar Covid”. Los firmantes consideran “importante” que la involucración de entidades privadas, y su rol y sus responsabilidades en el proyecto se identifiquen “de manera clara”.
A eso se le suman contratiempos técnicos. Parece que la aplicación no es compatible con ciertos teléfonos móviles, y que no funciona correctamente si no se activa el GPS.