El final de LaLiga se acerca y los equipos tiene que empezar a confeccionar las plantillas de la próxima temporada. En el Real Madrid están consiguiendo buenos resultados y lo ven todo de color de rosa. Tanto es así, que pensando ya en los fichajes que se vienen, el capitán Sergio Ramos ve con buenos ojos cualquier cosa, a pesar de que él no termina de llegar a un acuerdo con Florentino Pérez para dejar claro su contrato.
Todo apunta a que los de Zidane se convertirán en los campeones de esta liga que tenía ganada el Barça, puesto que en estos momentos tan solo dependen de ellos mismo. Y tienen un calendario que les favorece. No obstante, todavía restan unas cuantas finales y no lo tendrán fácil. No se pueden relajar.
Pero Zidane, que se ve ganador, está confeccionando ya lo que será la plantilla del Real Madrid 20/21. En ella, además del interés por varios jugadores que están destacando en Europa, está el interés por vender. Y es que si el Real Madrid quiere comprar jugadores, tendrá que deshacerse de algunos, que no están rindiendo como deberían.
El visto bueno de Sergio Ramos
El camero ha dado el visto bueno a las ventas que quiere realizar el club. A pesar de que a Florentino Pérez le sobra el dinero, y podría traerse al jugador que quisiera, el Real Madrid necesita vender jugadores para que vengan otros. Este sería el caso de James Rodríguez y Bale. Ambos jugadores han tenido oportunidades en este reinicio liguero, pero ninguno de los dos las ha aprovechado.
Por lo que respecta al colombiano, fuentes de su entorno dicen que le gustaría quedarse en Madrid. A su mujer le gusta la capital española, y tiene todo lo que necesita bastante controlado. Está cómoda en la ciudad y no le gustaría que su marido cambiara de equipo. No obstante, James Rodríguez no tiene hueco en la plantilla del Madrid en la próxima temporada. Por eso, lo mejor para todos sería continuar viviendo en Madrid, pero jugar en el Atlético. Su mujer habría dado el visto bueno.
El otro problema que tiene en estos momentos Zidane es saber qué hará con Bale. El jugador, que ha tenido problemas físicos durante toda la temporada, pero que no tenía ninguna intención de recuperarse ni aportar nada al conjunto madrileño, no cuenta para el técnico francés. Florentino quiere venderlo, aunque suponga perder mucho dinero. Pero el jugador no tiene cabida en el conjunto blanco.
A todo esto, Ramos habría dado el visto bueno.
El futuro de Ramos
Pero todavía quedan pendientes varios hilos. Sergio Ramos, el capitán del Madrid, todavía tiene que llegar a un acuerdo con el presidente. En estos momentos, el jugador todavía no ha renovado su contrato, puesto que pide mucho más de lo que Florentino está dispuesto a darle.
No es la primera vez que el camero discute con el presidente. Y es por este tipo de conversaciones por las que no se llevan bien. Además, su representante no ayuda, y por todos es sabido la mala relación entre ellos. Sergio Ramos pide dos años de contrato y aumento de sueldo. Florentino solo lo quiere renovar por uno.
Además, Beckham está dispuesto a ofrecerle al defensa un puesto en su equipo para jugar en la MLS, y retirarse allí al igual que lo han hecho grandes jugadores. El defensa ve con buenos ojos esta opción, pero su mujer no. Sergio Ramos podría solucionar sus problemas antes de meterse en el de los otros.