El tenis está de vuelta. Tras disputarse algunos encuentros de exhibición, la competición regresará el próximo 14 de agosto con el ATP 500 de Washington. El US Open mantiene su fecha y tras la gira americana llegará la arcilla, donde se celebrará el Mutua Madrid Open (en septiembre). Y eso que muchos mostraron algunas dudas respecto al hecho de retomar la actividad cuándo el coronavirus aún castiga con fuerza muchas zonas del mundo. Entre ellos, Rafael Nadal.
El español dijo que, si existía la posibilidad de que hubiese una vacuna antes del 2021, quizás no tuviera sentido volver este año. Sobre todo, porque algunos tenistas pueden ser reticentes a competir y eso puede generar diferencias en el ranking y trastocar todo el programa. Muchos contemplaban como mejor opción arrancar con normalidad el 2021. Djokovic fue otra de las voces.
Más bien el serbio, lo que relató, es que no era muy partidario de ponerse una vacuna. Pero sí que parece estar contento con el regreso del circuito, según ha manifestado recientemente. Sin embargo, otros tenistas no muestran tantas ganas y muchos podrían ausentarse de competiciones realmente importantes, incluso de Grand Slam.
Es el caso de Simona Halep, campeona de Grand Slam, con más de una veintena de trofeos y actual número dos del mundo. El coronavirus remite (aunque han surgido rebrotes) en Europa. Y es ahí donde piensa jugar. Fuera, sobre todo en Estados Unidos, se niega. No va a viajar, lo ha dejado claro. Y en el tenis, más que en otros deportes, la voz de los protagonistas es realmente relevante. Muchas bajas pueden hacer decaer el interés.
Y ese es el principal problema en el horizonte. De momento se ha bajado del carro Halep, pero pueden ser muchos más. Federer no jugará en lo que resta de 2020 por lesión y cualquier baja de los ‘top’ hará mucho daño a la imagen del tenis. Porque la decisión de regresar, con un calendario reducido y a ciudades muy afectadas por el covid-19, está claro que no ha contentado a todos por igual. Y quizás no sea lo más justo.
También queda por ver cuál es el nivel que muestran los tenistas en su regreso. En el fútbol se han tomado medidas como la pausa de hidratación y aumentar a cinco los cambios. Sin embargo, en el tenis no cambia nada: los partidos se pueden ir incluso a las 5 horas. Eso puede generar lesiones y partidos con un ritmo más bajo. ¿Era realmente necesaria la vuelta de la competición? Rafa Nadal y otros tenistas no lo tenían del todo claro.