Lionel Messi no está feliz en el Barcelona. Las temporadas sin títulos europeos, los escándalos, la salida de Neymar y otras tantas cosas han cansado al argentino que está pensando muy marcharse del club de sus amores para irse a jugar a la Argentina o en su defecto a China donde podrá retirarse con una danza de millones.
2El rifirrafe con Luis Enrique
La llegada del técnico asturiano zanjó la relación de Messi con el club. Luis Enrique quería dosificar al delantero con algunos partidos en la banca para el argentino, cosa que despertó la ira del jugador al punto que se hizo evidente el distanciamiento entre ambos. Las primeras semanas no fueron buenas, pues Messi veía partidos desde el banquillo y el club no ganaba. La presidencia intervino en el asunto para limar asperezas y mediar. Todo resultó que el técnico culé cedió ante la presión y no le dio tanto descanso al crack. Todo terminó bien pues se ganó el triplete.
