Elegir los mejores tomates en el supermercado no es una tarea que suela preocuparnos, a menos que debamos hacer una receta especial para un día importante. Ahí es cuando nos entran los sudores por elegir un buen producto. Y es que ya sabemos que en algunos supermercados, como Mercadona, elegir mal te puede costar llevarte un producto que no sabe a nada.
Por suerte, son muchos los tipos de tomate que puedes adquirir en las cadenas que disponemos a buen precio y mejor calidad. Y ya que estamos, puede que caiga alguna receta para hacer la mejor salsa de tomate, aunque no todos son adecuados para ello. Son muchas las variedades, y cada una es mejor para ciertas preparaciones, lo que descubrirás a continuación.
6La mejor receta para una salsa de tomate
Llega la mejor parte, la de aprender a hacer la mejor receta de salsa de tomate. En lugar de comprarla hecha en algún supermercado como Mercadona o Lidl, nada mejor que hacer una casera. Y sí, será incluso mejor que la ‘tradicional’, que las grandes cadenas tratan de venderte. Los ingredientes que vas a necesitar son 2 kilos de tomates, a elegir entre los que te hemos mencionado, 1 cebolla, 2 dientes de ajo y un pimiento verde. También necesitarás una cucharada de pimentón dulce, 1 pizca de azúcar para matar la acidez del tomate, sal, pimienta y aceite de oliva.
Echa mano de una olla, nada de usar sartén, y ponla a fuego lento con un chorrito de aceite de oliva. Añade el ajo bien picado, y cuando empiece a estar dorado, introduce la cebolla y el pimiento también picados. Salpimenta y cocina durante 10 minutos removiendo de vez en cuando.
Cuando veas que la cebolla es transparente y esté blanda, añade los tomates bien picados y sin piel y cocina durante 20 minutos. Pasado este tiempo, introduce la cucharada de pimentón dulce, el azúcar y si quieres, añade alguna especia de tu gusto como el romero, orégano o tomillo. Tapa la olla y sigue cocinando a fuego lento durante una hora.
Después de esta hora en la que deberías haber removido de vez en cuando la salsa, verás que esta ha espesado un poco, lo que significa que sus sabores están más concentrados. Es momento de probar y rectificar posibles errores, como la falta de sal. Si no quieres que la salsa tenga pedacitos, pasa todo por la batidora, y tendrás una salsa de tomate ideal.