La Real Federación Española de Natación (RFEN) ha solicitado al Gobierno de España que reconsidere haber excluido al deporte acuático de la Fase 1 de la desescalada, tras haber conocido este sábado la publicación en el Boletín Oficial del Estado (COE) el artículo 41.3 que excluye las zonas de agua, reza el organismo.
La RFEN emitió un comunicado dejando claro, en primer lugar, que «siempre ha sido, es y será respetuosa» en las decisiones del Gobierno y en todas las medidas oficiales que se tomen respecto a la crisis del coronavirus. Sin embargo, la Federación asegura que esto «no es óbice» para manifestar su sorpresa.
Dicha orden posibilita, en la Fase 1, la «realización de múltiples actividades deportivas en instalaciones al aire libre excluyendo incomprensiblemente las piscinas pese a la existencia del informe del CSIC, dependiente del Ministerio de Ciencia e Innovación, denominado «Informe sobre transmisión del SARS-CoV-2 en playas y piscinas» de 5 de mayo de 2020, que avala la seguridad del medio acuático donde el uso de agentes desinfectantes está ampliamente implantado desde hace años».
La práctica de la natación es reconocida como una actividad no solo altamente recomendable para la salud de la población, sino también imprescindible para el deporte federado y la supervivencia de los clubes con secciones acuáticas, a los que la restricción de la citada orden les provoca un perjuicio enorme y quién sabe si su definitivo cierre», añade el ente federativo.
«Por todo ello, desde la RFEN instamos al Gobierno de España a reconsiderar la modificación del artículo 41.3 del BOE de forma que se permita la apertura de las piscinas y zonas acuáticas para la práctica deportiva, que cumplan con las medidas de prevención e higiene exigibles al resto de establecimientos y actividades autorizadas dentro de la Fase 1 de transición hacia la nueva normalidad», finaliza la RFEN.