Japón ha retirado su candidatura para organizar el Mundial femenino de 2023 a solo tres días de que la FIFA tome una decisión sobre la nueva sede del campeonato, que dará el relevo a la cita de Francia en 2019.
La federación internacional confirmó este lunes que la Federación Japonesa de Fútbol se retiró de la carrera debido a que los Juegos Olímpicos de Tokyo 2020 se retrasaron un año, hasta verano de 2021, y al impacto de la crisis del coronavirus.
El comité ejecutivo de la FIFA elegirá este jueves entre las candidaturas de Colombia o la conjunta entre Australia y Nueva Zelanda para acoger el evento, recientemente expandido a 32 participantes.
Australia y Nueva Zelanda ofrecen buenas infraestructuras deportivas, aseguró la FIFA en la evaluación previa de las ofertas, y también parecería presentar la propuesta comercial «más favorable».
La oferta de Colombia cumplió con los requisitos mínimos, pero la FIFA expresó dudas sobre si se obtendría el apoyo y la inversión necesaria de las partes locales interesadas.
Antes que Japón, Brasil también retiró su candidatura justo antes de la fecha límite para las presentaciones finales. La selección de Estados Unidos ganó la edición de 2019, de 24 equipos, celebrada en Francia.