La tenista hispano-venezolana Garbiñe Muguruza reconoce que no estaba «preparada para el gran vacío» de estar si jugar al tenis, «lo mejor» que sabe hacer, aunque también ve lo positivo de darse cuenta de que «hay muchas cosas más»
«No estaba preparada, sobre todo para el gran vacío que he sentido al no poder hacer lo que mejor sé que es jugar al tenis. Y, en especial, no estaba preparada para no poder rellenar ese tiempo con nada que se le compare«, señaló Muguruza en un artículo para la revista ‘Vogue’.
La de Caracas recuerda que nunca ha estado «más de un mes en el mismo sitio». «Estoy batiendo un récord. La última vez fue cuando me operé del tobillo y no pude andar durante varios meses y de eso hace ya casi una década», remarcó.
Y es que la número uno española ha vivido «desde los tres años con la raqueta en mano por y para un único objetivo». «Cuando todo eso desaparece por fuerza mayor, la vida te da un codazo y te dice: ‘Eh, hay muchas más cosas que el tenis, quizás sea un buen momento para que te prepares para cuando tengas que colgar la raqueta», comentó.
Muguruza no esconde que pensaba que le parecía «imposible» cancelar Indian Wells, el primer gran torneo que cayó. «Me quedé blanca. Y Conchita Martínez, todavía más», expresó. A partir de ahí, «como fichas de dominó», se fueron suspendiendo más eventos, «incluido el más especial del año, los Juegos Olímpicos«. «Un evento tan único en el que todos los atletas sueñan con participar, conseguir una medalla y formar parte de la historia. Triste noticia», confesó.
La hispano-venezolana, que se califica «ciudadana del mundo» y que se siente orgullosa de su «sangre española, vasca y venezolana», lamenta también estar rodeada «la mayoría del tiempo de un mundo superficial«, en el que no se ve «identificada». «Son las experiencias únicas y compartidas las que nutren, alimentan tu visión, tu perspectiva y las ganas de vivir», añadió, recordando su vivencia al subir el Kilimanjaro.
Finalmente, se refiere a su carácter. «La impulsividad ha sido y es una cualidad en la que he trabajado mucho para tenerla bajo control, aunque intentando no perder la espontaneidad. Lamentablemente, he tenido que aprender a domarla al estar expuesta a los medios y al público, al que tanto nos debemos», remarcó.
«Mantener la naturalidad puede ser un reto cuando ves que algunos solo están esperando un desliz. No hay que perder la esencia, quien tú eres, porque para bien, o a veces para mal, esa eres tú. Hay que cultivar la personalidad y, sobre todo, tu carácter», admitió Muguruza, que durante la cuarentena ha aprovechado para «recuperar» sus estudios y «completar» dos cursos de Nutrición y Salud, uno de Psicología, y de Ciencia del Ejercicio.