El Sevilla logró su segunda victoria tras el parón liguero al imponerse al Leganés (0-3) en Butarque gracias a un doblete de Óliver Torres en la primera mitad y otro tanto de Munir en las postrimerías del encuentro, y permite a los andaluces confirmar el cuarto puesto de ‘Champions’, mientras que el Mallorca despertó a tiempo ante el Celta gracias a una goleada que le da licencia para seguir soñando (5-1) con la permanencia en la Liga Santander.
El equipo de Julen Lopetegui, sancionado este martes, no falló en su visita al sur de Madrid con motivo de la jornada 33 y pronto resolvió un envite que no tuvo mucha historia. El Lega ha caído en barrena y todo le sale al revés. Es el único equipo, junto a la Real Sociedad, que no ha ganado tras el confinamiento y el descenso es sólo cuestión de que las matématicas hagan justicia al mal año del cuadro blanquiazul.
En-Nesyri, muy motivado en su vuelta a Leganés, perdonó en las dos primeras ocasiones y Miguel Ángel Guerrero replicó para los locales con un gran cabezazo que detuvo Vaclík. Sin embargo, acto seguido, Óliver Torres no desaprovechó un balón sin dueño tras la salida del ‘Pichu’ Cuéllar en un córner.
El canterano atlético fusiló al fondo de las mallas para hundir anímicamente a los pepineros. El gol ‘mató’ a un Lega que no volvió a generar peligro. Para colmo de los madrileños, Óliver Torres hizo buena una jugada con Jesús Navas por el costado derecho para lograr el 0-2 a diez minutos del descanso.
No hubo más alternativas, tan sólo un disparo del voluntarioso Ruibal, pero los de casa no encontraron el camino para recortar distancias o dar emoción al encuentro. Todo lo contrario, fue el Sevilla quien logró el 0-3 en una jugada individual -de bellísima factura- resuelta por Munir. El triunfo da alas a los de Nervión, que se veían apretados por el Getafe en su afán por volver a la máxima competición europea.
Goleada del Mallorca al Celta
Por su parte, el Real Mallorca reencontró el camino de la victoria (5-1), la primera tras el parón por el confinamiento, tras un comienzo arrollador ante el Celta de Vigo, precisamente el equipo que marca el corte de la salvación. Los de Vicente Gómez apenas tardaron 13 minutos en conseguir el 1-0 después de un polémico penalti sobre Dani Rodríguez.
El árbitro De Burgos Bengoetxea interpretó que hubo un contacto de Santi Mina, pero las imágenes demostraron lo contrario. Lo sorprendente fue que -después de seis minutos para tomar una decisión- acabó confirmando el penalti. El Mallorca aprovechó la oportunidad y Budimir no falló desde los once metros con un gran golpeo para engañar a Rubén Blanco.
Los insulares fueron a más y en cuarto de hora de inspiración llevaron la renta al 3-0 gracias a Juan ‘Cucho’ Hernández y Alejandro Pozo. El Celta, que llegaba en un gran momento de forma con 8 de 12 puntos, incluido su partido con el Barça, recibió un verdadero rapapolvo ante un Mallorca más vivo que nunca. La forma en que llegó la derrota puede dejar tocado a los olívicos cuando parecían fuera de la quema del descenso.
Al comienzo de la segunda mitad, el equipo gallego se agarró a Iago Aspas después de que Pozo derribase a Mina. La pena máxima también ofreció dudas, pero el gol del Celta subió al marcador. Y cuando parecía que los de Óscar García se meterían en el choque, llegó una nueva tormenta de los bermellones con goles de Budimir y Salva Sevilla.
El bosnio culminó una gran jugada colectiva y el veterano centrocampista firmó el quinto de la tarde con un disparo desde la frontal. El Mallorca se liberó y acabó logrando un triunfo que vale más de tres puntos. Una victoria que devuelve la ilusión a los baleares después de sus resultados más recientes.