El presidente y Director Ejecutivo (CEO) de la Euroliga, el español Jordi Bertomeu, ha confesado que la cancelación del resto de la temporada de la Euroliga y Eurocup debido a la pandemia de la COVID-19 ha sido la «decisión más difícil» en los 20 años de historia del organismo continental, pero que ningún club ha pedido o expresado la necesidad de abandonar la competición por efecto de la crisis pandémica.

«Sin lugar a dudas, ésta es la decisión más difícil que hemos tenido que tomar en nuestros 20 años de historia. Debido a razones fuera de nuestro control, nos hemos visto obligados a interrumpir la temporada más exitosa y emocionante en la historia del baloncesto europeo», manifestó tras la reunión telemática del Comité Ejecutivo de la Euroliga.

Bertomeu justificó que el aplazamiento se produce tras dos meses y medio en las partes implicadas han mantenido su «determinación» y han agotado todas las vías posibles «para tratar de ofrecer una temporada completa y única» a los aficionados.

«Ése es nuestro compromiso y nuestra pasión en cada temporada, y quedarnos cortos debido a aspectos que están más allá del control de nadie es lo que más nos entristece», indicó el CEO de la Euroliga, que destacó que las cifras récord de los partidos les dan más energía para comenzar a preparar la temporada 2020-21.

El presidente de la Euroliga se declaró «especialmente orgulloso» de la unión de los clubs, jugadores, entrenadores, árbitros y aficionados de la Euroliga y Eurocup en estos tiempos «increíblemente difíciles». «Por el coraje en sus decisiones y por sus generosas contribuciones, por que nos han apoyado y comprendido en todo momento», celebró.

Bertomeu aclaró que tenían muchas motivaciones para reanudar la temporada 2019-20, pero explicó que en una situación «tan excepcional» deben poner la salud de las personas primero y «por encima de cualquier otro interés. «Al hacerlo, nos mantenemos fieles a nuestras creencias y lo que defendemos», añadió.

En los próximos meses, Euroliga tendrá como única misión trabajar para la vuelta a la normalidad. «Hacer todo lo que esté en nuestras manos para ayudar a nuestras comunidades a volverse más fuertes y construir la mejor versión de nosotros mismos, dentro y fuera de la cancha, para cuando podamos reunirnos con los aficionados. Este no es un fin, sino un nuevo comienzo», concluyó.

Posteriormente, en una rueda de prensa en la que estuvo Europa Press, Bertomeu explicó por qué se dejará desierto el título de campeón de Euroliga y Eurocup. «Tenemos un líder en la Eruoliga, pero eso no quiere decir que merezca ser campeón, porque la competición no ha terminado y quedaban partidos. Sin terminar la temporada, no se puede coronar a nadie», argumentó.

En este sentido, añadió que si no hay campeón de Euroliga ni de Eurocup, tampoco puede haber salidas o entradas de nuevos equipos a la máxima competición continental. «Empezaremos la nueva temporada de cero, esta queda cancelada a todos los efectos», reiteró.

El dirigente dejó claro que, aunque tienen que comprobar cuál ha sido el impacto económico en la competición y sus clubes por esta cancelación, ningún club ha expresado que deba abandonar la Euroliga por los posibles efectos de la pandemia.

«Es muy pronto para decir cómo afectará el coronavirus a los clubes. Les ayudaremos, daremos consejos, tendremos estrategias para superar las dificultades que puedan tener. Pero nadie piensa en dejar la Euroliga por los efectos del COVID-19, nadie nos lo ha expresado. Esperamos tener la competición de siempre», manifestó.

Problema con las Ligas

Bertomeu reconoció que, igual que la Euroliga ha optado por no interferir en el calendario de la siguiente temporada, espera que las ligas no añadan más dificultad a la hora de programar los partidos al ampliar el número de equipos.

«Espero que las ligas nacionales no amplíen sus competiciones, porque el calendario ya está apretado, y no es posible jugar a la vez (mismos días) Euroliga y las ligas nacionales. Nosotros hemos evitado posibles problemas al no dar campeón, ni ascensos ni promociones, pero no podemos interferir en las decisiones de cada una de las ligas», lamentó.

«La diferencia entre nuestra Euroliga y las ligas es mayor cada vez y es difícil de combinar. Es tiempo de proceder con nuestro proyecto de expansión. Es algo nuevo, fresco, mete a nuestros equipos en mercados mayores, pero debe ser compatible con las ligas. Tenemos el objetivo de ampliar la competición a otros mercados, aunque eso no significa que se vaya a ampliar el número de equipos», matizó.

En este sentido, aseguró que, en la próxima temporada, estarían preparados para modificar alguna jornada o aplazar un partido determinado si persistieran los problemas derivados de la pandemia. «Intentaríamos solucionar problemas aplazando partidos o cambiando el orden de partidos en una jornada, para poder continuar con el ritmo normal de la competición. Será una temporada diferente, deberemos ajustarnos a la nueva realidad», se sinceró.

En cuanto a una posible fuga de talento a la NBA de los mejores jugadores en Europa, no cree que vaya a ser así. «No creo que haya problemas para mantener el nivel y la calidad de los equipos. Esta temporada estaba siendo espectacular, y creo en el compromiso de clubes y jugadores con el prestigio de la Euroliga. No tengo preocupación alguna, los clubes mantendrán el talento e incluso creo que lo mejorarán», auguró.