El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha avanzado que el Consistorio y el Atlético de Madrid trabajan para que una serie de hitos recuerden siempre dónde estuvo el estadio Vicente Calderón, que «en una o dos semanas habrá desaparecido».
Almeida, ‘colchonero’ declarado, ha defendido que la memoria del Calderón es no sólo patrimonio de los atléticos sino de «toda la ciudad». Es por eso que cree importante que la zona verde que sustituirá al estadio lleve el nombre de Parque de Atlético de Madrid, como ha propuesto la Junta Municipal de Arganzuela.
El alcalde, partidario del traslado al Metropolitano para «poder crecer como club», ha destacado en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno momentos para olvidar, como «el Atlético-Ajax de la Champions de 1997», cuando fueron eliminados «de forma injusta», y otros para recordar, como el 4-3 remontando desde un 0-3 al enfrentarse en 2003 al ‘Dream Team’ de Johan Cruyff y, especialmente, cuando ganaron la liga en 1996 frente al Albacete «con goles de Quico y Simeone».
La vicealcaldesa, Begoña Villacís, también tiene buenos recuerdos del Vicente Calderón pero no desde el punto de vista del fútbol. Para ella el estadio albergó uno de sus mejores recuerdos, su primer concierto, en 1993, de Guns ‘n’ Roses.
La Junta Municipal de Arganzuela ha propuesto denominar Parque Atlético de Madrid al espacio ocupado por el estadio Vicente Calderón y la M-30 en el tramo no soterrado para que este punto de Madrid no se olvide de su espíritu ‘colchonero.
También se elevó al Pleno de esta semana la proposición para aprobar la designación de calle Casimiro Mahou Bierhans» al vial MC30. Ambas iniciativas están incluidas en el ámbito del proyecto de urbanización Nuevo Mahou-Calderón.
La concejala Cayetana Hernández de la Riva ya planteó esta «apuesta personal», informaba el Ayuntamiento en un comunicado, en el último pleno de marzo, que tuvo que posponerse por la crisis sanitaria. Lo puso sobre la mesa «como homenaje y reconocimiento al club Atlético de Madrid, cuya sede se ubicaba en el estadio, y a la figura del creador de la marca cervecera que albergaba la fábrica original de la empresa».
En 1961 se construyó la fábrica de Mahou en el Paseo Imperial con una extensión de más de 61.000 metros cuadrados, que, tras su demolición en 2011, forma parte del espacio donde se desarrolla esta gran operación urbanística, junto a la extensión que ocupaba el estadio de fútbol.
El proyecto urbanístico Mahou-Calderón, en marcha en la zona colindante con Madrid Río, albergaba el antiguo estadio Vicente Calderón. Tras su demolición y soterramiento de las vías destinará el espacio a la construcción de viviendas y espacios verdes.
