La directora general de Patrimonio Cultural del Gobierno de Canarias, Nona Perera, se ha comprometido a potenciar la investigación de la zona arqueológica de Villaverde, un yacimiento aborigen ubicado en la isla de Fuerteventura.
Según informa el Ejecutivo regional, se van a realizar jornadas de puertas abiertas al lugar y, en octubre, se celebrará el primer Campus dirigido a estudiantes de ambas universidades.
El yacimiento de la Cueva de Villaverde se está revelando como uno de los más importantes de Fuerteventura para conocer y estudiar el pasado aborigen de la Isla.
Por ello, Perera manifestó durante una visita a la zona en la que se está realizando una nueva campaña de investigación que este Bien de Interés Cultural que «está aportando datos muy reveladores sobre la industria lítica, ósea, cerámica, y excepcionalmente, sobre la alimentación y la práctica económica de la agricultura».
En este sentido, la Dirección General de Patrimonio Cultural ha financiado junto con el Cabildo de Fuerteventura, la Fundación Parque Tecnológico de la ULPGC, con el apoyo del Ayuntamiento de La Oliva, una tercera campaña de investigación en esta zona, iniciada hace cuatro meses por la empresa especializada Arenisca. Arqueología y Patrimonio.
«Se trata de un yacimiento espectacular que hay que seguir apoyando, aportando e invirtiendo dinero para poder conocer y contornear la cara y las manos de la población aborigen», señaló Perera.
RECONSTRUIR LA INFORMACIÓN SOBRE LAS DINÁMICAS DE OCUPACIÓN
Los trabajos iniciados en junio de este mismo año 2020 se centran en reconstruir la información acerca de las dinámicas de ocupación y estudiar en profundidad los resultados obtenidos en las excavaciones de las campañas anteriores.
Según explica la directora de la excavación y de Arenisca, Rosa López, estas nuevas investigaciones abarcan el análisis de «la época aborigen de Fuerteventura en todos sus momentos históricos, ver cómo cambió y evolucionó, su cultura material, su sociedad e incluso su medio ambiente».
Las estructuras indican que el tubo volcánico fue habitado durante un largo periodo de tiempo, de hecho, la Cueva de Villaverde se define como «uno de los yacimientos más antiguos de Fuerteventura, datado en el siglo V d.C.», según la arqueóloga, lo que lo convierten en un lugar de investigación fundamental para el estudio de la sociedad indígena de este Isla.
Por su parte, uno de los hallazgos más importantes en esta cueva ha sido la recuperación de semillas arqueológicas que podrían probar la existencia de agricultura en el periodo aborigen y además, el análisis de los restos óseos de un niño y un adulto enterrados en el interior del tubo volcánico entre los siglos XVII-XVIII d. C han supuesto un avance en los estudios relacionados con el contexto funerario para comprender el medio de vida y la dieta de la primigenia población de la Isla.