Freddy Mercury es un icono de la música. Un mito que todavía vive en las canciones de Queen. Sin embargo, este cantante tiene una apasionante vida más allá de los escenarios. En sus 45 años de vida le dio tiempo a pasar por muchas adversidades, pero también por muchos triunfos. Hizo grandes amistades, conoció el amor, conoció la amistad, pero también conoció la cara de la enfermedad.
La historia del compositor de Bohemian Rhapsody, de Somebody to Love y de muchos otros himnos del rock de los 70-80 fue una continua aventura hasta que llegó su trágico final. Vamos a hacer un repaso de lo que vivió esta leyenda más allá de los escenarios.
9Freddie y los gatos
El animal preferido de Freddie Mercury eran los gatos. Se estima que llegó a adoptar hasta 12 gatos a lo largo de su vida. Los recogía de la calle, los compraba de razas caras y exclusivas e incluso se los quedaba tras una ruptura con alguna pareja esporádica.
Era un hecho que cuando Freddie estaba de gira, les llamaba por teléfono. E incluso alguna vez bromeó con dejarles de herederos de su fortuna tras su muerte. Incluso algunas canciones de éxito de la banda fueron inspiradas por los felinos.