Un día estamos tranquilas en el hogar y nos asomamos al espejo para hacer cualquier gesto gracioso que se nos ocurra. Al detallar el rostro observamos que hemos sido egoístas con nosotras mismas porque nuestra piel tiene mucha grasa, no posee el tono vivo de antes y está repleta de puntitos negros. Pensamos que el paso del tiempo está llevándose la juventud, pero el angelito malo, nos remarca que hay dejadez en nuestra acciones.
Al hablar con las amigas que siempre están observando cada detalle de nosotras. Nos aconsejan que esa piel avejentada revive con exfoliantes caseros con base en aceite de oliva y hasta ahí queda la conversación, porque estamos tan apenadas con lo que observaron en nuestra cara que no se nos ocurrió preguntar qué lleva el exfoliante casero.
Tranquila, tu angustia terminará porque agrupamos las más importantes:
6 Aceite de oliva y café molido
Es seguro que has quedado sorprendida de los múltiples beneficios que tiene el café. Sirve para quitar los malos olores, para espantar insectos, tratar el cabello y ahora para exfoliar la piel. Es un impacto que cuesta asimilar, por qué razón, porque es un líquido adorado por casi toda la humanidad. Muchos dirán ‘no pienso usar el café para eso’. Cuando veas los beneficios en tu piel quizás cambies de opinión.
En esta oportunidad vas a preparar un Mocaccino, pero en tu rostro. No mentira, es una broma. En un recipiente vas a incorporar tres cucharadas de café con una de oliva. Vas obtener una pasta que llevarás a tu rostro luego de haberte lavado con agua y jabón neutro. Masajea en movimientos circulares y retira al cabo de minuto y media con agua tibia. Es una maravilla, además que tu piel adquirirá un buen color, ¡qué bonita manera de pigmentarla! y pensar que Beyoncé gastó muchísimo dinero para aclarar su piel.