Dos caras nuevas se sentarán en el Consello de la Xunta que, por primera vez, reunirá el presidente, Alberto Núñez Feijóo, este lunes, y en el que solo le acompañan otras dos desde que se puso al frente el Ejecutivo autonómico en 2009: el ahora vicepresidente primero, Alfonso Rueda, y la conselleira do Mar, Rosa Quintana. Lo harán como miembros del noveno gabinete de Feijóo, en el que, por primera vez desde la última etapa del fraguismo, tendrá dos vicepresidencias.
La pandemia marca este arranque de Legislatura y se ha dejado notar, toda vez que Feijóo ha decidido prescindir de Jesús Vázquez Almuiña y Carmen Pomar, quienes hasta ahora portaban las carteras que más sufren el desgaste de la crisis sanitaria del coronavirus.
Sin embargo, fuentes populares consultadas por Europa Press sostienen que la gestión de Almuiña está «refrendada» por el presidente gallego y vinculan su salida con un desgaste del propio dirigente a nivel personal debido al impacto de la COVID-19. Públicamente, el presidente siempre ha destacado la gestión sanitaria en la Comunidad y ha puesto en valor la «anticipación» en esta área.
Para su relevo, opta por un perfil de «gestor»: una de las caras nuevas que se sentará en el Consello, el hasta ahora gerente del área sanitaria de Vigo, Julio García Comesaña.
En el caso de la salida de Pomar, las fuentes consultadas subrayan que la puerta de salida del Gobierno se le abre por una cuestión práctica, ya que ha decidido «reorganizar las áreas» y devolverlas a Román Rodríguez, quien ya en su día tuvo competencias educativos. A Rodríguez se le «presupone», remarcan desde el entorno de Feijóo, el dominio de la gestión educativa por que ya tuvo estas competencias.
Sin embargo, distintas voces dentro del partido apuntan que el de Pomar era el mayor desgaste que había en el Gobierno. El propio Feijóo, aunque también señalaba al Ministerio de Educación, lamentó en su discurso de investidura la situación de incertidumbre y de improvisación que habían vivido los padres a las puertas de que arranque el nuevo curso escolar y ya en una situación complicada.
Ahora encomienda el reto al que hay quienes sitúan en el «triunvirato de confianza» de Feijóo: Román Rodríguez. Este «triunvirato» lo completarían el vicepresidente primero, Alfonso Rueda, presidente del PP de Pontevedra y uno de los hombres fuertes del PP gallego, y Francisco Conde, hombre de confianza y amigo personal del presidente, que sube de rango a vicepresidente segundo y asumirá funciones de «coordinación transversal» en el plano económico.
DOS VICEPRESIDENCIAS, CONSELLERÍA DE EMPREGO Y ADIÓS A INDUSTRIA
Feijóo ha decidido descargar a Rueda de Administración Pública –competencia que ahora gestionará junto con Facenda Valeriano Martínez–, pero evidencia la relevancia que concederá a Turismo en este mandato, el del Xacobeo 2021, al encomendarle su gestión. Clave en la victoria electoral del de Os Peares en 2009 es uno de los dos únicos conselleiros que sigue desde ese primer gabinete. Y uno de los nombres que figura en la terna sucesoria del líder del PP gallego, quien ha asegurado que este será su último mandato.
En esa terna, junto con otros dirigentes como el presidente del PP de A Coruña, Diego Calvo, también ha entrado en los últimos tiempos Conde. Ahora, pese a que Feijóo vuelve a rememorar la etapa del fraguismo en la que había dos vicepresidencias, fuentes desvinculan este movimiento de la clave sucesoria. Esta llegará, afirman, en una remodelación con fecha sin determinar, pero ahora la «prioridad» es combatir la pandemia.
En un escenario marcado por conflictos como los de Alcoa o el cierre de Endesa en As Pontes, de los nombres del organigrama desaparece «Industria» –el vicepresidente segundo es ahora conselleiro de Economía, Empresa e Innovación–. Tampoco pasa a ningún otro titular. Igualmente, desaparece Formación Profesional del encabezado del departamento que regresa a las manos de Román Rodríguez.
Pero eso sí, Feijóo confía en María Jesús Lorenzana, otra conocedora de la Administración en el segundo nivel, para una Consellería de nueva creación también dentro del ámbito económico: la de Emprego e Igualdade. Será uno de los principales retos de su Ejecutivo, apuntan desde su entorno, para la reactivación después de la crisis sanitaria.
REMODELACIONES DE GABINETES
La pandemia ha marcado un antes y un después. Y es que un repaso de las crisis de gobierno de Feijóo en su trayectoria como presidente evidencia que la mayor parte de los cambios que ha realizado llegaron motivados por otros movimientos políticos previos –fichajes para el Ejecutivo central o salida para los ayuntamientos, sobre todo–.
Tras nombrar Gobierno en 2009, el primer cambio que impulsó Feijóo llegó en enero de 2012, cuando Elena Muñoz y Rocío Mosquera sustituyeron, respectivamente, a Marta Fernández Currás y a Pilar Farjas al frente de las carteras de Facenda y Sanidade.
Esta primera remodelación respondió a la «obligación» de cubrir las bajas de Farjas y Fernández Currás, quienes salieron de la Xunta y entraron con cargos de segundo nivel en el primer Ejecutivo de Mariano Rajoy. Del Ejecutivo gallego también salieron Samuel Juárez y Roberto Varela, así que Feijóo optó por reducir de diez a ocho las consellerías, unificando Medio Rural y Mar –que dejó en manos de Quintana– y Educación y Cultura –que dirigía Jesús Vázquez–. Fue su segundo Gobierno.
VICEPRESIDENCIA PRA RUEDA EN 2012
En ese mismo 2012, el presidente gallego logró de nuevo mayoría absoluta en la comunidad y eligió continuismo, a excepción de Javier Guerra, sustituido por Conde. Con todo, la principal novedad de este tercer Gobierno fue designar a Rueda vicepresidente.
Su cuarto Ejecutivo llegó en 2014, cuando dio la orden a Agustín Hernández, quien hasta entonces ocupaba la Consellería de Infraestruturas, de ponerse al frente de la Alcaldía de Santiago, pese a ir cerrando la lista, tras un mandato convulso con otros dos regidores previos del PP –Gerardo Conde Roa y Ángel Currás–.
Más tarde, dando pie a su quinto Ejecutivo, saldrían de San Caetano Jesús Vázquez y Elena Muñoz para batirse en la arena local de Ourense y Vigo. El hasta entonces diputado Román Rodríguez y el que era secretario xeral de Presidencia, Valeriano Martínez, tomaron las carteras de Educación y Facenda.
Pero una de las crisis de gobierno más profunda llegó en octubre del año 2015. Tras varias polémicas, Feijóo decidió destituir a la conselleira de Sanidade, Rocío Mosquera, cargo que pasó a ocupar Jesús Vázquez Almuiña. También volvió a dividir Mar (departamento en el que mantuvo a Quintana) y Medio Rural.
Pero además, Feijóo creó, precisamente para Rey Varela, quien había perdido la Alcaldía de Ferrol, la Consellería de Política Social, volviendo a elevar a un total de diez el número de Consellerías. Al tiempo, Feijóo reordenó las competencias de otros departamentos. Por ejemplo, Conde vio aumentado su poder al asumir, además de Economía e Industria, las competencias de empleo, que hasta entonces eran responsabilidad de Beatriz Mato.
Ésta se mantuvo entonces en el Ejecutivo con una cartera de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, a la que dio pie la separación de la macroconsellería que Ethel Vázquez había heredado de Agustín Hernández. Vázquez siguió en el Gobierno gallego con competencias sobre Infraestruturas e Vivenda. Fue su sexto gabinete.
El séptimo llegó tras los comicios de 2016, con continuismo pleno de todos los titulares; mientras que la última remodelación, que dio lugar a su octavo Gobierno, con 11 departamentos, se produjo en 2018, con cambios de caras y competencias. Entonces entraron Pomar, que ahora sale, y también José González y Fabiola García.