«Mariscada para dos», albóndigas y otras cosas que mejor no pedir en restaurantes

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Cuando tenemos una cita especial, una cena de empresa o simplemente nos apetece salir de casa para comer fuera, los restaurantes nos ofrecen una gran variedad de productos de los que disfrutar. Eso sí, y esto hay que agradecérselo a muchos camareros por su sinceridad, mucha de las cosas que pedimos no son nada buenas. Más veces de lo que crees te has estado comiendo algo que ha manoseado otra persona, o era un resto que no se podía tirar.

Efectivamente, no podemos bajar la guardia ni siquiera cuando salimos a comer fuera. Para tu suerte, a continuación tienes los platos que pedimos de forma más habitual, y que no debemos volver a adquirir. Acerca un cubo porque no te va a hacer ninguna gracia, ni a ti ni a tu estómago, saber lo que habéis estado comiendo.

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Olvídate de las albóndigas de restaurantes

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Otro plato que no deberías pedir, incluso cuando es un restaurante que presume de tener las mejores calidades, son las albóndigas. Y es que en casi la totalidad de los restaurantes recurren a la misma triquiñuela para colarte producto en mal estado, o a punto de estarlo. Si alguna vez has hecho albóndigas, sabrás que las mejores son las hechas con carne picada de ternera y cerdo.

Sí, están muy buenas, igual que la comida del McDonald’s, pero eso no significa que sean buenas. ¿Sabes cómo disimular carne en mal estado?, basta con darle un baño de vinagre y a la plancha. Pues lo mismo pasa con este plato, muchos restaurantes, incluso en algunos de categoría, utilizan la carne que está cerca de echarse a perder para las albóndigas. Se pica en un momento y se mete en la mezcla. Entre el baño de vinagre, la carne buena y la salsa elegida, no te estarás dando ni cuenta de lo que estás comiendo en realidad.