La directora Isabel Coixet, galardonada con el Premio Nacional de Cinematografía, ha afirmado que no tiene «argumentos» para decir si el ministro de Cultura, José Manuel Rodríguez Uribes, ha estado «a la altura» de la gestión de la crisis del coronavirus, porque, «a toro pasado, es muy fácil decir lo que se habría hecho».
«Estar a la altura de las cosas en una situación donde no tenemos puntos cardinales… es muy fácil a toro pasado decir teníamos que haber hecho esto o lo otro. Pero no tengo los argumentos para decir si (el ministro) ha estado a la altura o no», ha explicado en declaraciones a Europa Press la cineasta.
En este sentido, ha señalado cómo «si hace siete meses» le llegan a decir que la gente tendría que andar por la calle con mascarilla o que los aforos de cine y conciertos se reduciría al 35% no se lo habría creído. «Soy una persona muy crítica con casi todo, empezando por mí misma, pero aquí no tengo argumentos para criticar», ha reconocido.
En cualquier caso, la directora de ‘Mi vida sin mí’ ha admitido que se encuentra preocupada por la incidencia de las medidas sanitarias en las salas. «Está claro que el cine como lo concebíamos va a ser otra cosa: esperemos que la evolución de esta pandemia no vaya a peor, que es lo único que pido», ha asegurado.
Coixet no cree sin embargo que el final de las salas de cines esté cerca. «Sinceramente, espero que no. La prueba está en que cuando a la gente se le ha dado algo que quiere ver, ha ido. Hay una lenta recuperación, pero la gente necesita también más que nunca ese espacio de ver películas que no es su casa», ha aseverado.
La directora, que concluyó a finales de febrero el rodaje de su nuvea película ‘Nieva en Benidorm’, ha recibido el premio «feliz» y ha bromeado sobre el hecho de que sea un reconocimiento a su trayectoria. «Ya me asustó cuando me lo dieron en Málaga hace diez años. Pero es normal, cuando eres mayor y has tenido más tiempo para desarrollar una carrera, tiene sentido», ha explicado.
Coixet ha recibido este premio «sin ningún problema», por el hecho de que provenga de las instituciones, porque el jurado está formado por entidades que respeta «mucho». «Si ellos lo deciden, no soy quién para negarme a recibirlo», ha añadido, para luego pasar a hablar de sus proyectos.
«Ahora tengo muchas ideas en la cabeza y a veces pienso que me gustaría tener menos proyectos que me distraigan para poder centrarme en lo importante», ha comentado con humor. «Pero lo importante es tener curiosidad y ganas y, si te dan un premio, es una gran guinda y un empujón para seguir haciendo cosas», ha defendido.
Respecto al empleo que va a hacer con los 30.000 euros del premio, ha adelantado que parte irá destinada a «ayudar a gente a despegar en el cine». «Justamente esta mañana había leído un proyecto de un nuevo director que me ha parecido fantástico y ya me estaba comiendo la cabeza sobre cómo lo podíamos hacer», ha concluido.