El presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Antonio Garamendi, ha afirmado que está a favor, como pedían los sindicatos, de que la protección de los trabajadores en expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) se mantenga en el 70% y no baje al 50% pasados 180 días.
Así lo ha señalado el presidente de CEOE tras reunirse con el Gobierno y sindicatos en Palma de Mallorca para abrir la mesa de negociación del diálogo social para abordar la prórroga de los ERTE más allá de 30 de septiembre.
Garamendi también ha defendido la necesidad de focalizar las exenciones de cotizaciones a la Seguridad Social en aquellas empresas que están cerradas, planteamiento que ha sido visto con buenos ojos por parte del Gobierno.
«Un empresario no va a contratar a nadie porque le financien el 14% del coste laboral, pero es una medida clave para un empresario que tiene un problema grave de liquidez y que tiene que pagar la cuota a la Seguridad Social», ha explicado, tras pedir que se exonere a las empresas que aún no han podido abrir sus negocios.
«Las fórmulas son las que son y pensamos que hay que dar una vuelta en este sentido», ha añadido respecto a las exoneraciones, tras abogar por focalizarlas en las empresas que están cerradas. Para el presidente de la patronal, aunque los ERTE son una herramienta que ha funcionado, es el momento de hacer políticas activas para poner en marcha la economía.
Asimismo, ha vuelto a insistir en que los ERTEs se tienen que prorrogar, «como mínimo», hasta la Semana Santa del próximo año, o incluso hasta el mes de junio. «Es evidente que deben continuar con los ERTEs», ha apostillado, tras afirmar que los ERTE han venido para quedarse, pero que espera que dejen de activarse y que también habrá que hablar de otras medidas para que se reactive la economía.
«Los agentes sociales hemos demostrado nuestra responsabilidad. La palabra es que nadie se quede desatendido y a la vez habrá que hacer políticas reales y planes especiales para sectores, con respecto al turismo y otros sectores en los que tendrán que implementarse», ha dicho.
De su lado, el presidente de Cepyme, Gerardo Cuerva, ha pedido certidumbre, porque «la empresa española lo necesita». «No podemos estar en negociaciones de último minuto, porque la empresa necesita plazos», añadió, tras recordar que en la anterior negociación para prorrogar los ERTEs más allá del 30 de junio el acuerdo se alcanzó a última hora.
Cuerva ha hecho hincapié en que la pequeña y mediana empresa está «muy tocada» y que necesita medidas más allá de los ERTE. «Si no ponemos toda la carne en el asador ahora, posiblemente nos podamos lamentar en el otoño o invierno de que no hicimos todo lo posible para salvar el tejido productivo y para salvar sociedad», ha destacado.