El verano de este 2020 ha cerrado con 202 fallecidos en las carreteras españolas, un 6% menos con respecto al año pasado, convirtiéndose así en el verano menos siniestro de la historia. En concreto, durante los meses de julio y agosto de este año, se han producido 185 accidentes mortales (un 7% menos) y un total de 821 personas han requerido hospitalización (un 8% menos).
«Nunca ha habido un verano con menos fallecidos en la serie histórica», ha destacado el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, que no obstante, ha advertido de que las cifras de fallecidos en las carreteras «nunca son buenos».
El ministro ha dado a conocer estos datos este jueves en la sede de la Dirección General de Tráfico (DGT). En la presentación del balance de siniestralidad del verano de este año han estado también la subsecretaria del Ministerio del Interior, Isabel Goicoechea, y el director general de Tráfico, Pere Navarro, entre otras autoridades.
Según el balance de este verano, durante el mes de julio se produjeron 105 accidentes mortales en los que fallecieron 114 personas, 3 fallecidos menos que los 117 registrados en julio del pasado año. Y en agosto se produjeron 80 accidentes mortales en los que perdieron la vida 88 personas, lo que supone 10 fallecidos menos que en el mismo mes de 2019. Según ha recalcado el ministro, se trata del agosto con menos fallecidos de la serie histórica.
Los días con más muertos fueron el 5 de julio, con una decena de fallecidos, y el 22 de agosto, que registró 8 muertos, aunque en este mes de agosto hubo dos días sin ninguna víctima mortal, según ha subrayado Marlaska.
EL 76% DE MUERTES, EN VÍAS CONVENCIONALES
De manera detallada, el 76% de los fallecidos se produjeron en vías convencionales. En este tipo de vías hubo 153 fallecidos, frente a las 150 víctimas del año anterior. Por el contrario, en autopistas y autovías perdieron la vida 49 personas, cuando en 2019 el verano registró 65 muertos. «La cifra de 49 muertos es la más baja de la serie histórica en autovías y autopistas«, ha remarcado el ministro.
Por usuarios, este verano ha registrado 84 muertes de usuarios vulnerables, lo que suponen el 42% del total de víctimas mortales: 20 peatones, cuando en 2019 fallecieron 14; 9 ciclistas, frente a los 10 del año pasado; y 55 motoristas y usuarios de ciclomotor, cuando en verano de 2019 murieron 69.
En este sentido, se han reducido el número de fallecidos en todos los medios de transporte excepto en el de peatones y ciclomotor, que han aumentado. De hecho, el número de fallecidos en turismos este verano ha sido de 92, la menor cifra de la serie histórica.
Por tipo de accidente, la salida de vía sigue siendo el accidente con más víctimas mortales (representando el 47% del total de accidentes), con 95 fallecidos, seguida de la colisión frontal (19%), con 38 fallecidos. Según ha destacado Marlaska, entre los principales factores que causan estos accidentes se encuentran los despistes y el consumo de alcohol y drogas.
Según el balance de la DGT de este verano, el único grupo de edad que ha visto aumentada la mortalidad es el de los más jóvenes (entre los 15 y 24 años), pasando de 23 fallecidos en el verano de 2019 a 38 en 2020 (un 19% más), una «modificación sustancial» que, tal y como ha reconocido el ministro, ha «llamado la atención». Por ello, el ministro ha emplazado a los más jóvenes a concienciarse sobre este tema.
Otro dato que ha dado a conocer Marlaska es que el 27% de los fallecidos en turismo y furgoneta durante este verano no hacía uso del cinturón de seguridad (28 muertos) en el momento del siniestro, el porcentaje más alto en los últimos 10 años (20% en 2019). Además, 1 motorista, 1 usuario de ciclomotor y 2 ciclistas fallecidos no llevaban casco.
Las comunidades autónomas que han registrado mayores descensos han sido Cataluña (16 fallecidos menos) y Comunidad de Madrid (4 menos). Por el contrario, han aumentado en Cantabria y Castilla y León (1 fallecido más en cada región), en Baleares, Navarra y País Vasco (con 3 más en cada una), en Andalucía (4 más) y en Castilla-La Mancha (6 más).
UN 9,18% MENOS DE DESPLAZAMIENTOS
En cuanto al número de desplazamientos, durante este verano se han producido un total de 82,8 millones de viajes de largo recorrido, un 9,18% menos que el año pasado, cuando se produjeron 91,2 millones. En julio, los desplazamientos fueron de 40,2 millones (un 7% menos) y en agosto de 42,6 millones (cerca de un 11% menos).
Asimismo, los desplazamientos por pasos fronterizos descendieron un 25,1%. Marlaska ha atribuido este descenso a que este año no ha habido el tradicional ‘Paso del Estrecho’, que cada verano provoca el desplazamiento de millones de vehículos.
El día con más desplazamientos fue el viernes 31 de julio, con 1,7 millones de viajes, mientras que el día con menos desplazamientos fue el sábado 4 de julio, con poco más de 1 millón.
Según el ministro, los viajes de este verano han estado condicionados por la pandemia de COVID-19. «Es cierto que la disminución ha facilitado la gestión del tráfico sin que hayan existido retenciones significativas en la ‘Operación Salida’ y en la ‘Operación Retorno», indica. De hecho, el pasado 30 de agosto solo hubo que habilitar carriles adicionales en la A-1 y en la A-5.
UN 23% MENOS DE MUERTOS EN LO QUE VA DE AÑO
En el acumulado anual, se llevan contabilizados 543 fallecidos, cuando en 2019 se registraban ya 708 muertos, lo que supone un descenso este año del 23%.
Esta diferencia se debe a la reducción de la mortalidad durante el Estado de Alarma, ya que durante este periodo (del 15 de marzo al 20 de junio) un total de 117 personas perdieron la vida en las carreteras, cuando en el mismo periodo de 2019 esta cifra ascendía ya a 287, lo que supone un 59% menos.
Sin embargo, tras el fin del Estado de Alarma, han muerto 225 personas, una cifra similar a la del año anterior (235), de solo un 4% menos.
Cuando acabe la pandemia, los accidentes de tráfico seguirán siendo importantes», ha alertado el ministro, que recuerda que 1,3 millones de personas pierden la vida al año en el mundo, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), consecuencia de la «violencia vial», y otras 50 millones resultan heridas graves.
Durante la rueda de prensa, el ministro ha recordado también las cifras de siniestralidad vial de 2019, que se cerraron de manera definitiva en el mes de agosto de este año. Según ha destacado, hubo 1.755 muertos en accidentes de tráfico en España, frente a los 1.806 de 2018.
En vías interurbanas, el número de víctimas mortales fue de 1.236, un 6% menos que en 2018 (cuando se registraron 1.317), si bien se contabilizaron 519 fallecidos en vías urbanas, un 6% más que el año anterior (cuando se registraron 489 muertos). En este sentido, Marlaska ha manifestado su «preocupación» por las cifras de muertos en vías urbanas, donde más del 80% fueron usuarios vulnerables.
De hecho, en este sentido, en 2019 por primera vez los usuarios vulnerables superaron a los fallecidos sobre cuatro ruedas, representando así el 53% del total de fallecidos. Por este motivo, Marlaska ha asegurado que «antes de fin de año» pasará a consulta pública la reforma del Reglamento General de Circulación, que pretende incluir «medidas encaminadas a la protección de los colectivos vulnerables».
En cualquier caso, ha destacado que España, con 37 víctimas mortales en accidentes de tráfico por millón de habitantes, es «un determinado referente junto a los países nórdicos», ya que la media de la UE se sitúa en 51.