La petrolera BP cree que la recuperación de la demanda de carburantes en las estaciones de servicio españolas ya ha llegado a su pico, tras la abrupta caída registrada desde que en marzo se decretase el estado de alarma para frenar la expansión del virus y contener los contagios.
Así lo ha asegurado el presidente de la compañía en España, Luis Aires, durante su participación en el V Foro de Energía de ‘El Economista’, que vaticina que la demanda de carburantes nunca volverá a registrar los niveles que se alcanzaron antes del estallido de la crisis económica derivada del coronavirus.
La peor semana desde el inicio del confinamiento se vivió a principios de abril, cuando esta demanda cayó un 80% respecto al mismo periodo del año pasado, momento en el que toda la industria no esencial tuvo que paralizar sus operaciones ante la dramática situación sanitaria por la que atravesaba el país.
Desde entonces, la recuperación fue del 5% cada semana hasta el verano, cuando la demanda se ha estabilizado, estancándose ahora entre un 10% y un 15% de caída respecto al año pasado, un dato que Aires cree que es estructural y es en el que se quedará a partir de ahora.
El directivo de BP ha explicado que se da una combinación de factores que explica que el pico de la demanda de carburantes en España ya se ha quedado atrás, debido al estallido de esta última crisis económica, la mayor eficiencia de los motores de combustión interna y la llegada de los vehículos eléctricos.