El Ministerio de Asuntos Económicos y Energía de Alemania ha actualizado este martes su cuadro macroeconómico, del que se desprende que el producto interior bruto (PIB) del país registrará una contracción del 5,8% en el conjunto del año, lo que supone una mejoría de cinco décimas con respecto a la caída del 6,3% prevista en abril.
El Ministerio germano ha asegurado que en el segundo trimestre la contracción económica alcanzó el 9,7% en comparación con el mismo periodo del año pasado. No obstante, también ha afirmado que el peor momento para la economía tuvo lugar en mayo y que, desde entonces, hay «señales claras» de recuperación.
El repunte de la economía se completará en 2021, cuando el PIB registrará un avance del 4,4%. Sin embargo, el PIB no alcanzará sus niveles previos a la pandemia hasta el comienzo de 2022, según ha puntualizado el Ministerio.
Las previsiones presentadas este martes asumen que el Gobierno alemán no tendrá que implantar medidas restrictivas para el contacto entre las personas como las adoptadas en marzo y abril. En su lugar, contemplan que se reaccione al alza de nuevos casos mediante medidas dirigidas y limitadas regionalmente para que la actividad económica pueda seguir creciendo en los próximos meses.
«El proceso de recuperación de la economía tras el confinamiento de primavera ha empezado y subraya la fortaleza y resiliencia de las empresas en Alemania», ha indicado el ministro de Asuntos Económicos y Energía, Peter Altmaier.
«También muestra que el escudo protector sin precedentes que el Gobierno federal ha puesto en marcha y el paquete de estímulos que se ha aprobado (…) están siendo bien recibidos por los ciudadanos y las empresas, así como que han proporcionado un claro impulso para que la economía vuelva a su senda de crecimiento», ha agregado Altmaier.
Con respecto al resto de indicadores económicos principales, el Ministerio estima que el consumo de los hogares se contraerá un 6,7% en 2020, mientras que aumentará un 4,7% en 2021, mientras que la formación bruta de capital fijo descenderá un 3,7% este año y crecerá un 5,2% el próximo.
Asimismo, en el conjunto de 2020 las exportaciones caerán un 12,1%, mientras que las importaciones descenderán un 8,1%. Para el próximo año, la previsión es que crezcan un 8,8% y un 7,5%, respectivamente.