El inglés es la eterna asignatura pendiente. Todos los años, en enero o en septiembre, llegan las promesas de retomar el inglés y apuntarse a una academia. Algunos los consiguen, la mayoría seguramente renuncian pronto. La mala relación de los españoles con el idioma inglés es motivo de burla en toda Europa. Lo cierto es que, en general, somos bastante torpes a la hora de aprender y usar la lengua anglosajona.
En general nos defendemos con el inglés, y poco más. Este precario manejo de la lengua lleva muchas a confusiones cómicas. El que no tiene muy manejado un idioma extranjero habla con las categorías y la estructura mental de su lengua materna. De ahí los errores, trampas y cómicas equivocaciones en las que podemos caer con facilidad. Aquí van algunas de ellas.