El precio de los carburantes ha encadenado su segunda subida consecutiva, tras encarecerse hasta un 0,25% esta semana, y confirma así la tendencia alcista en este verano, después de descender a mínimos en mayo en plena pandemia del coronavirus.
En concreto, el precio medio del litro de gasolina ha subido esta semana ese 0,25% con respecto a la semana anterior, hasta situarse en los 1,166 euros.
En el caso del litro de gasóleo, esta semana se ha incrementado más ligeramente (+0,003%), hasta alcanzar un precio medio de 1,061 euros, según datos del Boletín Petrolero de la UE consultados por Europa Press.
Desde los mínimos que tocó en mayo en plena pandemia del coronavirus, el precio del litro de gasolina ha recuperado un 8,7% y el del gasóleo ha subido un 8,2%.
HASTA UN 13% MÁS BARATO QUE HACE UN AÑO
No obstante, en comparación con la misma semana de agosto del año pasado, el diésel y la gasolina se han abaratado hasta un 13%. En concreto, en la cuarta semana de agosto de 2019 el precio medio del litro de gasóleo era de 1,198 euros, en torno a un 13% por encima del precio actual, mientras que el de gasolina se situaba en 1,308 euros, un 12% más.
A pesar del encarecimiento de los precios en España, la gasolina sigue estando más barata respecto a la media de la Unión Europea (UE) y la zona euro, donde el litro cuesta 1,276 euros y 1,319 euros, respectivamente, al mismo tiempo que el litro de gasóleo cuesta de media 1,138 euros en la UE y 1,156 euros en la eurozona.
El menor nivel de precios finales con respecto a los países del entorno se debe a que España, pese a las subidas del IVA, a los mayores impuestos y a los gravámenes al biodiésel, sigue contando con una menor presión fiscal, en general, que la media comunitaria.